Toda la Cámara pide subir las cuantías de los planes de ayudas a la actividad agraria debido al alza de precios

SANTIAGO DE COMPOSTELA, 17 Dic. (EUROPA PRESS) -

Todo el Parlamento gallego ha pedido, tras una iniciativa del BNG, subir las cuantías de los planes de ayudas a la actividad agraria debido al alza de precios.

En la comisión de Agricultura, Xosé Luís Rivas (BNG) ha remarcado la "brutal subida" en combustibles, electricidad y materiales de construcción que afecta gravemente a las explotaciones.

Esta propuesta insta al Gobierno gallego a solicitar a la Comisión Europea y al Gobierno central la habilitación de "fondos especiales" para afrontar el aumento de costes de producción, así como actualizar el "módulo de precios en próximas convocatorias de ayudas de incorporación a la actividad agraria, planes de mejora y pequeñas explotaciones".

El diputado del BNG ha celebrado el acuerdo que califica de "paso adelante" en la dirección de consolidar la permanencia de la actividad agroganadera, mientras asegura que la realidad rural precisa de manera urgente medidas impulsen y potencien su desarrollo económico y social.

Remarca que la convocatoria de ayudas de incorporación a la actividad agraria, planes de mejora y pequeñas explotaciones fueron presentadas a tiempo, pero antes de estos incrementos que hacen "inviable" la mejora solicitada o las obras de inicio de actividad.

Además, expone que las peticiones de nuevas incorporaciones solicitas en febrero de 2020 "no se empezaron a resolver hasta junio de 2021", a lo que sumó el incremento de precios.

PUJA DIGITAL

Por otra parte, el Parlamento ha aprobado una proposición no de ley, del PPdeG, en la que se insta a la Xunta a poner en marcha una puja digital de ganado vacuno.

"Este tipo de lonjas no pretenden sustituir los procedimientos actuales de venta, pero ofrecen un sólido canal alternativo con vocación de consolidación en el futuro", expone la portavoz popular de Medio Rural, Elena Candia.

Incide en que "uno de los aspecto a mejorar es la realización de las pujas de ganado vacuno, en las que se exige la presencia física de los animales, que, en el caso de no ser vendidos, vuelven a la explotación de origen, lo que implica un coste importante para el ganadero, tanto desde la perspectiva temporal como económica, ademá de un perjuicio materializado en el bienes de los animales".