Jácome, el más activo, se viste de 'power ranger' para cerrar unas fiestas en las que pudimos ver a Rueda de mago en 'comadres'
SANTIAGO DE COMPOSTELA, 13 Feb. (EUROPA PRESS) -
Cuando a finales de diciembre se supo que los gallegos acudirían a las urnas el 18 de febrero, muchos se imaginaron que la última semana de campaña depararía imágenes curiosas como las vividas este martes de Carnaval, en la que han sido varios los políticos que se han empapado de las fiestas con sus disfraces, algunos, con guiños a sus adversarios o a cuestiones de actualidad en sus zonas.
Si el jueves de comadres, arranque oficial en uno de los epicentros del Entroido como es Verín, se pudo ver al presidente de la Xunta y aspirante del PPdeG, Alfonso Rueda, vestido de mago, este martes también visitó la localidad ourensana la nacionalista Ana Pontón, que se ha ataviado con un 'capuchón' para evitar ser repredinda por los cigarrones que 'castigan' a aquellos que no se disfrazan.
Esta prenda tradicional del Entroido verinés tiene su origen a comienzos del siglo XX, cuando era empleada por las clases populares para disfrazarse en las fiestas que se organizaban en el Casino. Con esta especie de casaca colorida "que no puede faltar en casa de todo verinés", Pontón llevó su caravana al Entroido en el que actuó de anfitriona la cabeza de lista del BNG por la provincia ourensana, Noa Presas, disfrazada de pediatra para denunciar "la carencia" de estos facultativos en "muchas" zonas de Galicia.
El político más activo durante este carnaval ha estado, precisamente, en la capital de la provincia de Ourense. Desde el jueves se ha podido ver a su alcalde, Gonzalo Pérez Jácome, de astronauta secundado por robots, de Superman, de Frai Canedo o, este martes, de power ranger amarillo, el color que identifica a una Democracia Ourensana a la que las encuestas dan opciones de hacerse un lugar en el Parlamento gallego con sede en Santiago.
Allí, en la capital gallega, su gobierno ha proclamado "el sultanato" de Goretti Sanmartín. Con la alcaldesa al frente, los concejales del BNG se han vestido con ropajes árabes, en un guiño a las críticas lanzadas por el líder de la oposición en el Ayuntamiento de Santiago, el popular Borja Verea, por la contratación de asesores municipales.
También ha tirado de ironía la alcaldesa de A Coruña, Inés Rey, que, ha vuelto a sumarse al martes 'choqueiro', para, en esta ocasión, tomarse con humor una de las problemáticas que afectan a la urbe optando por un disfraz de jabalina.
Si el año pasado hizo de Shakira en la famosa sesión con Bizarrap llena de 'pullas' hacia Gerard Piqué, en 2024 la regidora coruñesa y referente del PSdeG se puso la careta y un traje para 'convertirse' en este mamífero sobre el que, hace meses, también se había referido con sorna alegando que al no estar empadronados en A Coruña, sus 'visitas' a la ciudad no eran un problema que tocase solventar a su gobierno.
