Sanidade mantiene la recomendación de no consumir agua de la traída
SANTIAGO DE COMPOSTELA, 27 Sep. (EUROPA PRESS) -
Las analíticas realizadas en el agua de la traída de la población de Corme, en el municipio de Ponteceso (A Coruña), tras un brote de gastroenteritis, han detectado la presencia de "agentes contaminantes".
Así lo ha informado este viernes el Ayuntamiento de Ponteceso, que explica que la Xefatura Territorial de Sanidade "mantiene la recomendación de no usar el agua de la traída de Corme-Porto, ni para beber ni para manipular alimentos".
"Según los datos que nos ha remitido el servicio autonómico, en las muestras de agua tomadas en el centro de salud de Corme había presencia de bacterias coliformes y clostridium perfringens", ha destacado el Ayuntamiento en un comunicado.
Por ello, el Consistorio ha asegurado que "continuará con el reparto de agua embotellada", para lo que establece como punto de almacenamiento y distribución la lonja nueva de Corme.
COLABORACIÓN
Al mismo tiempo, el gobierno municipal ha explicado que "seguirá colaborando con la Consellería de Sanidade para erradicar la contaminación del agua lo más pronto posible".
El alcalde de Ponteceso, Xosé Lois García Carballido, ha apuntado que el "problema de potabilidad" afecta "en exclusiva" a Corme-Porto, donde aconseja que "se use agua embotellada tanto para beber como para cocinar y para lavar alimentos".
