SANTIAGO DE COMPOSTELA, 30 Sep. (EUROPA PRESS) -
La bodega Ponte da Boga ha presentado Capricho de Godello, una propuesta monovarietal en la que ofrece todo el potencial de esta variedad emblemática de Ribeira Sacra.
Tras una experiencia inicial en 2008 en la que por primera vez se fermentaba este blanco en barrica, en 2019 se retomó la idea de volver a elaborar un Godello singular con el objetivo de "mostrar la complejidad de la variedad con el transcurso del tiempo", explica la bodega.
En esta ocasión, tras una maceración pelicular de 6 horas, pasa a una fase de fermentación y crianza en barricas de roble francés de 500 litros, conservándolo sobre sus lías durante cinco meses, ha apuntado la firma. Posteriormente, se culmina la crianza en botella durante un año antes de su lanzamiento.
El resultado, describe la bodega, "es un vino serio, con una estructura potente y una buena acidez que lo dotan de un gran equilibrio y un perfil aromático complejo". En él, la madera aporta notas tostadas que complementan las notas a fruta de hueso y cítricas.
Capricho de Godello "se mantiene fresco y alegre, pero con la seriedad y complejidad que le aporta al paso del tiempo".
Esta propuesta, de producción limitada a 1.350 botellas, se incorpora a la gama de "caprichos" de Ponte da Boga, una línea de vinos provenientes de variedades y elaboraciones singulares, de la que también forman parte Capricho de Merenzao y Capricho de Sousón.
Este nuevo lanzamiento forma parte de la inquietud investigadora y divulgadora para mostrar las excepcionales características de la Ribeira Sacra y la riqueza las variedades cultivadas, con el objetivo de extraer todo su potencial elaborando vinos únicos.
