A CORUÑA, 21 Ene. (EUROPA PRESS) -
Un fuerte dispositivo de seguridad formado por agentes de la Guardia Civil y del Cuerpo Nacional de Policía impidió que los mariscadores de a flote de la ría de O Burgo de A Coruña cortaran de nuevo el tráfico en Puente Pasaxe desde las 7.30 horas, tal y como tenían previsto desde el viernes.
Ante esto, los mariscadores decidieron manifestarse en la acera de la misma zona, en dirección A Coruña y después en dirección Santa Cristina (Oleiros) durante alrededor de una hora y media, y vigilados por alrededor de cuarenta agentes de seguridad.
La Policía Nacional informó a Europa Press de que la Subdelegación del Gobierno "había denegado el permiso para dicha manifestación", por saber que iban a provocar cortes de tráfico, por lo que finalmente sólo se produjo "tráfico lento de manera puntual" por conductores que "se quedaban mirando lo que pasaba".
El patrón mayor de la Cofradía, Manuel Cao, reconoció a Europa Press que conocieron la prohibición el viernes por la noche pero que los mariscadores "decidieron concentrarse igualmente pero sin cortar el tráfico".
PROTESTAS.
Los mariscadores comenzaron sus protestas el 3 de enero con la quema de neumáticos en el acceso a la ciudad en Alfonso Molina, y continuaron al día siguiente provocando una caravana al circular a velocidad anormalmente reducida por la misma zona. Además el pasado 14 de enero cortaron el tráfico en Puente Pasaxe provocando fuertes retenciones durante alrededor de una hora.
Desde entonces se han producido manifestaciones diarias en diferentes puntos de la ciudad de manera pacífica y en las que han aprovechado para recoger alrededor de 8.000 firmas de apoyo para la limpieza de la ría.
Cao insistió en que continuarán "endureciendo" sus protestas que se harán "de manera sorpresa" mientras Pesca no acceda a formar una mesa de trabajo para negociar un nuevo plan de regeneración. El actual contempla ayudas de 82 euros diarios durante 48 días en el primer semestre de 2008 como compensación por la paralización de la actividad.
Por su parte Pesca ya advirtió de que no permitiría que dichas movilizaciones "entorpezcan la vida diaria de los ciudadanos" y amenazó con retirar las ayudas a los mariscadores que en sus protestas lo hicieran.
