El Puerto de A Coruña ensaya un sistema inteligente para calcular el ciclo de vida útil de la infraestructuras

Actualizado: viernes, 21 agosto 2009 17:56

El proyecto del CSIC busca reducir costes mediante la detección de daños y aumentar así la productividad de las instalaciones portuarias

A CORUÑA, 21 Ago. (EUROPA PRESS) -

El Puerto de A Coruña ensaya un sistema inteligente desarrollado por el Instituto de Ciencias de la Construcción Eduardo Torroja --perteneciente al Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC)-- y que tiene como objetivo calcular el ciclo de vida útil de las infraestructuras portuarias, así como detectar daños y anomalías en un estado "temprano" y "en tiempo real".

El proyecto, que se denomina Dynaport, pretende lograr "un importante avance" en el diseño y desarrollo de técnicas avanzadas para la conservación, mantenimiento y explotación de "una amplia variedad" de instalaciones de transporte, según explicó la Autoridad Portuaria en una nota de prensa.

En este sentido, explicó que hasta el momento existen "muy pocos métodos" que permitan realizar la medición de los niveles de seguridad y durabilidad en una estructura de hormigón en sus distintos ámbitos de aplicación, en gran parte por la complejidad de la reproducción del ambiente real.

Por ello, es "fundamental" contar con estructuras preexistentes, indicó, que sirvan como base para los ensayos químicos y mecánicos que a continuación se compararán con los resultados obtenidos por modelos teóricos.

Con este fin, el edificio de la compañía frigorífica será el material de experimentación de los investigadores, cuyos estudios se centrarán en cinco fases: la de diseño y rediseño, construcción y rediseño, mantenimiento y explotación, reparación y postreparación de la arquitectura.

OPORTUNIDAD "ÚNICA"

De esta edificación, que se demolerá con motivo de la ampliación del muelle del este, el equipo encargado de la investigación extraerá elementos estructurales representativos afectados por la corrosión, como es el caso de pilares o vigas. "Es una oportunidad única para validar los ensayos y mediciones", señaló la propia dirección del proyecto.

Además, la autoridad portuaria indicó que Punta Langosteira constituirá un escenario "paradigmático", ya que se trata de un puerto en "plena" construcción, que cumple todos los requisitos necesarios para calcular la durabilidad de las estructuras de este tipo.

"Gracias a las soluciones tecnológicas" que desarrolle esta iniciativa, los científicos podrán recalcular estos patrones, recalcó e hizo hincapié en que el lugar presenta un "extraordinario" volumen de material. En total, se prevé la fabricación de 3,5 millones de metros cúbicos de hormigón.

Tanto los bloques como los cajones deberán soportar la acción dinámica de las olas, la influencia de altas presiones y la agresividad del medio marino, por lo que el puerto reivindicó su "utilidad" para la validación de los citados indicadores de seguridad y durabilidad.

REDUCCIÓN DE COSTES

Asimismo, insistió en que la aplicación de esta herramienta busca "optimizar" las acciones de mantenimiento, conservación y explotación de las infraestructuras, ya que la falta de calibración de los modelos es "una de las causas del incremento de los costes de esas instalaciones".

En esta línea, aseguró que este sistema no sólo permitirá "reducir los costes finales", sino que "incrementará" la competitividad del sector portuario. Sus principales destinatarios serán, por ello, las administraciones, grandes constructores y pymes.

Al término de los trabajos, el proyecto Dynaport aportará una memoria en forma de "libro de la estructura" --informó el puerto-- en el se reflejarán los requisitos "clave" que se concluyan.

El Instituto de Ciencias de la Construcción Eduardo Torroja, que depende del CSIC, cuenta con una acreditada experiencia en el estudio del hormigón armado, ya que durante unos treinta años realizó aportaciones sobre aspectos relacionados con su resistencia. En cuanto a acciones de I+D, el grupo desarrolló numerosos proyectos financiados por la Comisión interministerial de ciencia y tecnología.

El que se experimenta en el puerto de A Coruña, en concreto, se incluye en el Plan nacional de investigación científica, desarrollo e innovación tecnológica. En él colaboran diversas administraciones y empresas a nivel estatal.