SANTIAGO DE COMPOSTELA, 18 Feb. (EUROPA PRESS) -
El temporal que estos días afecta a Galicia provocó la pasada noche la caída de unos 15 árboles sobre las carreteras gallegas, pero esta situación no propició, hasta el momento, ningún accidente, según informó hoy el servicio de Emergencias del 112.
Además, en la autopista AP-9, a su paso por Cambre, Moeche y Fisterra (A Coruña), se formó una bolsa de agua y en otros puntos de la red viaria, algunos elementos del mobiliario urbano, como señales de tráfico o contenedores, fueron arrancados o desplazados por el fuerte viento.
Así, Protección Civil de Cangas (Pontevedra) realizó dos salidas esta madrugada, en las los efectivos tuvieron que actuar por la caída de ramas de árboles en la zona de O Gatañal y desprendimientos del tendido eléctrico y uralitas plásticas en el Colegio Nazareh.
Por otra parte, hasta 12 casas se inundaron por las abundantes precipitaciones caídas esta noche, pese a que las lluvias no sobrepasaron los límites que indican una situación de emergencia.
En cambio, en Estaca de Bares (A Coruña) la velocidad del viento sí excedió los umbrales establecidos y se registraron rachas de 144 kilómetros por hora, que llegaron en momentos hasta los 153.
PREVISIONES
En cuanto a las previsiones para las próximas horas, la Consellería de Presidencia anunció que la intensidad del viento repuntará, de modo que, tanto en el litoral como en el interior, rondará los 60 kilómetros por hora, con rachas de hasta 90 kilómetros por hora.
Además, las precipitaciones aumentarán y se espera que alcancen hasta los 60 litros por metro cuadrado en la mitad oeste de la comunidad. Asimismo, la cota de nieve se situará en los 1.000 y los 1.200 metros de altitud.
