Baleares registra en 2010 una caída de la inmigración extranjera del 21%

Un total de 12.982 extranjeros emigraron a Baleares en 2010, lo que supone un 21,19% menos que en 2009, cuando lo hicieron 16.473, un descenso que se explica por el efecto disuasorio de la inmigración que ha provocado la situación de crisis económica también en Baleares, con una menor demanda de mano de obra en los sectores de la construcción y servicios.

Según datos estimativos hechos públicos este lunes por el Instituto Nacional de Estadística (INE), esta caída en los flujos migratorios hacia Baleares apenas tuvo incidencia en el caso de migrantes españoles, al contabilizarse el año pasado 671 ciudadanos españoles que emigraron a Baleares desde el exterior, frente a los 637 que lo hicieron el año precedente.

En total, el archipiélago recibió en 2010 un total 13.653 inmigrantes (entre extranjeros y españoles) procedentes del extranjero, un 20,2% menos que en 2009.

Los mismos datos, recopilados de diferentes variables demográficas (movimientos naturales de población, fecundidad, padrón, etc.), revelan, asimismo, un descenso del 40% en el número de personas que emigraron en 2010 desde las islas hacia el extranjero, con 8.088 personas, frente a las 13.584 que lo hicieron en 2009. Entre los que se fueron, 7.237 eran extranjeros y 851 españoles.

No obstante, la estadística del INE refleja un saldo migratorio exterior (diferencia entre inmigrantes y emigrantes) positivo en Baleares, lo que significa que en 2010 siguieron entrando desde el extranjero más personas a las islas de las que se fueron. En concreto, el archipiélago registró 5.565 migrantes netos, frente a los 3.526 de 2009.

Así, en 2010 entraron (inmigrantes) a Baleares 13.653 personas y se marcharon (emigrantes) 8.088, lo que arroja el saldo migratorio positivo de 5.565 personas.

Por el contrario, el saldo migratorio interior (entre CCAA) fue negativo (-419), lo que significa que fueron más los baleares que se marcharon a otra comunidad (25.159) que los españoles que emigraron a las islas (24.740). Por sexos, el saldo fue positivo en el caso de las mujeres (103) y negativo en el de los hombres (523).

Una situación que no se produjo en 2009, cuando el saldo migratorio entre comunidades fue positivo (634) en el caso de Baleares, al superar el número inmigrantes (25.425) el de emigrantes (24.791).

En cuanto al número total de personas que residen en Baleares, siempre según datos estimativos, el INE informa que a 1 de enero de 2011 había en las islas 1.088.514 personas, un 0,87% más que en la misma fecha de 2010 (1,07 millones), de los que 545.059 son hombres y 543.455 mujeres.

DATOS ESTATALES

El año 2011 ha arrancado con un total de 46.152.925 personas viviendo en España, lo que supone un incremento del 0,35 por ciento en el número de habitantes respecto a la misma fecha de 2010, cuando se contaban 45.989.016 ciudadanos.

Según la estadística oficial, en España residen 22,7 millones de hombres y 23,4 millones de mujeres, que superan a los varones en algo más de 703.000.

Por grupos de edad, el más numeroso en España es el de quienes tienen actualmente entre 35 y 39 años: casi cuatro millones de personas (3,98). Le siguen quienes están entre los 30 y los 34, que ascienden a 3,95 millones; la población entre 40 y 44 (3,74 millones) y la de edades entre los 45 y los 49 (3,48 millones).

Por comunidades autónomas, Andalucía sigue siendo la región española con una mayor población, al superar los 8,25 millones de habitantes. Le siguen Cataluña, con 7,33 millones de ciudadanos; Madrid, con 6,36 millones y la Comunidad Valenciana, que rebasa en cuatro mil personas los cinco millones de habitantes.

Asimismo, en Aragón residen 1.314.906 personas; en Asturias, 1.055.557; en Baleares, 1.088.514; en Canarias, 2.100.235; en Cantabria, 578.632; en Castilla y León, 2.491.420; en Castilla-La Mancha, 2.046.717; en Extremadura son 1.083.259; en Galicia, 2.736.636; en Murcia, 1.468.127; en Navarra, 622.125; en el País Vasco, 2.140.339; en La Rioja, 313.149; en Ceuta 75.763 y en Melilla, 74.078 ciudadanos.

En general, todas las comunidades y ciudades autónomas han aumentado su población con respecto al 1 de enero de 2010, a excepción de Galicia, que pierde unos 2.000 habitantes; Asturias, con unos 3.000 ciudadanos menos; Castilla y León, donde se reducen en cerca de 8.000 y La Rioja, con un descenso que ronda el millar, conforme los mismos datos del INE.