PALMA, 26 Oct. (EUROPA PRESS) -
El Consell de Mallorca, el Ayuntamiento de Calvi, el Govern y la Delegación del Gobierno en Baleares se han reunido este miércoles para hacer balance de cómo ha transcurrido la temporada turística y de la aplicación del decreto ley contra el turismo de excesos en el municipio.
Según ha recordado la institución insular en nota de prensa, tienen las competencias en ordenación turística desde enero, cuando el Ejecutivo autonómico se las otorgó. Éstas, unidas a las de promoción turística que ya ejercía, hace que el Consell tenga todas las competencias turísticas en la isla.
La presidenta de la institución insular, Catalina Cladera, ha afirmado durante el encuentro que son "muy contundentes contra la oferta ilegal y el turismo de excesos", y quieren "serlo más".
"Desde esta responsabilidad, trabajamos conjuntamente con el resto de instituciones por un turismo de mayor valor y menor volumen que nos permita seguir siendo referentes, y para alcanzar este objetivo es muy importante poner fin a la oferta turística ilegal y al turismo de excesos en Mallorca", ha remarcado.
En este sentido, Cladera ha recordado que se aumentará la plantilla de inspectores de turismo en otros cinco miembros que se añadirán a los 15 ya existentes, y también se reforzará la tramitación de sanciones "para ser más efectivos en su cumplimiento".
Calvi ha sido el segundo municipio donde el Consell ha realizado más visitas de inspecciones, con un total de 196 hasta el 25 de octubre. De éstas, 90 se han realizado en viviendas turísticas, 52 en hoteles, 20 en establecimientos de restauración y entretenimiento, 15 en hoteles-apartamentos, 11 en apartamentos turísticos, y también en una agencia de viajes y en una central de reservas. Estas inspecciones han dado pie a 59 actas de infracción.
En julio de este año, el Consell cedió al Ayuntamiento de Calvi la potestad de sancionar y cerrar establecimientos que incumplan la norma del turismo de excesos, tal y como contempla la propia normativa en los casos de Calvi, Llucmajor y Palma.
En ese tiempo, el Consistorio ha tramitado 30 expedientes sancionadores vinculados al decreto ley de excesos, de las que diez infracciones son muy graves, relacionadas con la venta de alcohol fuera de horario permitido, y dos por cosificación de la mujer. Además, otros 20 expedientes son graves, vinculados a las ofertas de alcohol, control de party boats y control en algún establecimiento hotelero.
El alcalde de Calvi, Alfonso Rodríguez, ha destacado "la importancia de trabajar desde todas las administraciones y fuerzas y cuerpos de seguridad con un objetivo común", como es el de "desterrar los excesos", lo que ha permitido "tener capacidad de reacción hacia excesos que todavía perduraban".
Los inspectores del Departamento de Transición, Turismo y Deportes también han realizado inspecciones en otros municipios turísticos, como Palma (701), Llucmajor (131), Pollena (84), Alcúdia (75), Santanyí (71), Santa Margalida (60), Manacor (55), Capdepera (54) o Sóller (51).
Además, desde que el Consell ejerce las competencias en ordenación turística se han ejecutado más de 1.900 inspecciones, que han supuesto más de 500 actas de infracción. La mayoría de visitas de inspección se han realizado en alojamientos turísticos (72%), seguido de los intermediarios turísticos (16%) y establecimientos de restauración y entretenimiento (11%). De las más de 500 actas de infracción que se han tramitado la mayoría son en viviendas turísticas ilegales o por sobrecomercialización.
El Consell ha recordado que la ciudadanía tiene a su disposición un servicio para poder informar si tiene el conocimiento o sospecha de alguna oferta turística ilegal que se esté ofreciendo en Mallorca. Hasta ahora se han recibido 182 denuncias por esta vía, de las que 155 eran referentes a viviendas ilegales.
