Mar Romera, pedagoga: "Los niños deberían sentirse seguros para poder equivocarse en el colegio"

Asegura que "la calidad de tu vida depende de la de tus pensamientos" y aboga por la educación emocional en las escuelas

PALMA DE MALLORCA, 15 Feb. (EUROPA PRESS) -

La pedagoga, docente y experta en inteligencia emocional Mar Romera ha considerado que "los niños deberían sentirse seguros para equivocarse en el colegio", ya que "el error es una fuente de aprendizaje" y ha abogado por implementar la dimensión de "educación emocionante" en las aulas, además de la emocional.

Así lo ha expresado en una entrevista concedida a Europa Press durante su visita a Mallorca para compartir con profesores de distintas escuelas su modelo pedagógico 'Educar con tres Cs: Capacidades, competencias y corazón', que consiste en "adaptar el sistema a la actualidad" y "poner en el centro de la diana a los niños y no al currículum".

Sobre ello, Romero ha explicado que la educación actual "está enfocada, en mucha medida, a sacar buenas notas" pero que los alumnos "no saben para qué sirven" y ha defendido otro sistema que contemple que "la actualidad es fluida y cambiante".

"LA CALIDAD DE TU VIDA ES LA DE TUS PENSAMIENTOS"

Romera ha explicado de que "el mundo ha evolucionado demasiado rápido y el cerebro no estaba preparado para ello" y ha avisado de que "los niños que son fuertes desde un principio para asumir los cambios son los que llevarán una vida con más calidad".

Es decir, según ha argumentado la pedagoga, "la calidad de tu vida depende de la de tus pensamientos y no de las circunstancias". Además, estos pensamientos están guiados desde una plataforma emocional, por lo que "si se aprendes a gestionarla y regularla" conseguirás "una vida mucho mejor".

Es por ello que Romera ha subrayado la importancia que tiene la educación emocional en las escuelas. "La educación no debe pensarse para mañana, sino para hoy, no son ciudadanos del futuro, sino del presente y, por eso, debemos integrarlos desde este punto de vista", ha considerado.

En este sentido, ha dicho que la clave esta en saber conocer tus emociones y gestionarlas en cada momento de la forma oportuna. Ha propuesto dos dimensiones para trabajar dicha educación en los colegios, la emocional y la emocionante.

Por lo que respecta a la emocional, ha explicado que requiere de tiempos específicos para trabajar en procesos de alfabetización, conciencia y socialización emocional. El objetivo es aprenderlos e interiorizarlos.

En este punto, también ha resaltado que las emociones son respuestas adaptativas del cerebro para la supervivencia y que, a modo de metáfora, son como un músculo que se entrenan con horas de gimnasio. "Los niños necesitan vivir las emociones, no aprenderlas con apuntes", ha dicho.

Por otro lado, ha planteado la educación "emocionante", un modelo entendido "desde el lunes antes de entrar hasta el viernes al salir" que se centre en el "respeto y el cambio de mirada de los adultos" con la finalidad de que los niños "quieran ir al colegio" y "les apasione".

La pedagoga ha esperado que el colegio sea un espacio donde puedan desarrollar sus plataformas de seguridad y de amor y que, además, también sientan que pueden equivocarse. "No quiere decir que la escuela sea un parque de atracciones pero si un lugar donde quieran ir por gusto a evolucionar y saber más", ha matizado.

Asimismo, Romera también ha explicado que la educación debería de centrarse primero "en el ser" --en cada individuo-- y después "en el saber", ya que una viene después de la otra.

"Cuando yo era pequeña y te dolía la garganta tres veces te operaban de amígdalas, ahora sería una locura. La pregunta es, por qué en educación seguimos haciendo lo mismo si sabemos que hay caminos más eficaces y eficientes", ha concluido la pedagoga.