Más de 30.000 viviendas alquiladas en Baleares no se declaran al fisco, según Gestha

PALMA DE MALLORCA, 6 Oct. (EUROPA PRESS) -

Más de 33.000 alquileres de Baleares son arrendamientos sumergidos que escapan anualmente del control del Fisco, lo que supone que cinco de cada diez arrendamientos localizados actualmente en el archipiélago presentan irregularidades, según la II edición del Estudio sobre la Evolución sobre los Alquileres Sumergidos en España realizado anualmente por el colectivo de Técnicos del Ministerio de Hacienda (Gestha).

Pese a ello, la cifra de viviendas no declaradas en las islas se ha reducido en seis puntos porcentuales en los últimos tres años, al pasar de representar el 64,1% del parque total de inmuebles en alquiler en 2004, a un 58,5% en 2006.

El informe de Gestha -elaborado a partir del cruce de los datos relativos al periodo 2004-2006 del Ministerio de Vivienda y la declaración del Impuesto de la Renta de las Personas Físicas (IRPF)- revela que si bien las medidas adoptadas por el Ejecutivo contribuyeron a dinamizar "incipientemente" el mercado de alquiler en Baleares, aumentando el número de declarantes en casi 3.145 personas en estos tres años, todavía el 17% de las viviendas de las islas siguen vacías, según datos de este Ministerio.

Por otro lado, el estudio muestra que el rendimiento medio del alquiler declarado por los contribuyentes de Baleares creció por encima del número de declarantes, situándose en una media de 5.160 euros anuales, lo que supone un incremento del 8,8% en el periodo 2004-2006 -más de 210 euros en todo el trienio-, situándose por encima del aumento real de precios en el mercado nacional. Según datos del Ministerio de Vivienda, el precio medio de la vivienda en alquiler en el Archipiélago Balear se incrementó en un 7% en este trienio.

Paralelamente, el estudio de Gestha constata que los propietarios baleares fueron, junto con los catalanes, los declarantes que incrementaron sus beneficios brutos en mayor medida con una media de unos 420 euros más (+9%), seguidos de Madrid, Comunidad Valenciana, Castilla-La Mancha y Aragón. Por el contrario, los contribuyentes que aumentaron en menor medida sus rendimientos brutos entre 2004 y 2006, con apenas 80 euros (+3,5%), fueron los extremeños.

Según Gestha, la excepción la han protagonizado los contribuyentes canarios, que fueron los únicos declarantes de España que redujeron sus rendimientos brutos, registrando una media de 27,5 euros menos en el trienio analizado.

EL NIVEL DE FRAUDE DISMINUYE UN 0,5% EN BALEARES

Por otro lado, el informe de los Técnicos de Hacienda revela que el nivel de fraude en Baleares apenas experimentó variaciones en estos tres años. Así, las rentas sumergidas derivadas del arrendamiento de vivienda disminuyeron cerca de medio punto (-0,4%) en esta comunidad, poniendo de manifiesto la eficacia de las medidas de prevención del fraude fiscal puestas en marcha por el Ejecutivo con el fin de aflorar la economía sumergida.

Por el contrario, Cataluña es la comunidad autónoma donde más han aumentado las rentas no declaradas, registrando un crecimiento del 10,5% entre 2004 y 2006, hasta alcanzar 714 millones de euros anuales. El segundo lugar lo ocupa la Comunidad de Madrid, que protagonizó un incremento de fraude por alquileres sumergidos del 8,6% en el trienio analizado, con 478,7 millones de euros anuales.

BALEARES, ENTRE LAS DIEZ CCAA CON MAYOR NÚMERO DE ALQUILERES NO DECLARADOS

Por comunidades autónomas, el informe de Gestha señala que Baleares es, con un 58,5%, la séptima región que concentra mayor volumen de alquileres sumergidos en relación con su parque de viviendas en alquiler, por detrás de comunidades como Andalucía (73,6%), Extremadura (71,8%) o Canarias (66,5%) que si bien redujeron el fraude por debajo de la media en estos tres años siguen liderando el ranking de arrendamientos sumergidos.

Por el contrario, las regiones que presentan menor número de alquileres no declarados son La Rioja y Aragón donde apenas un 23% de los arrendamientos escapan del control del Fisco. En estos tres años estas regiones consiguieron rebajar la economía sumergida en este capítulo muy por encima de la media hasta el punto de defraudar un 66% por ciento menos que el resto de comunidades analizadas