PALMA, 8 Nov. (EUROPA PRESS) -
La dirección insular de Medio Ambiente ha finalizado la campaña de anillamiento durante la migración postnupcial en el Parque Natural de sa Dragonera, en la que se han capturado 624 aves de 25 especies diferentes, 23 de ellas paseriformes y dos no paseriformes.
Según ha explicado este martes el Consell de Mallorca en nota de prensa, la iniciativa, realizada por el Grupo de Ornitología Balear (GOB), ha durado un total de siete días, aunque el primero y el último han servido para montar y desmontar la estación, por lo que realmente ha estado activa cinco días. En ella han participado además siete personas.
Del total de 624 capturas, 551 corresponden a nuevos anillamientos y 73 a controles de aves anilladas durante la campaña (es decir, que se vuelven a capturar una vez anilladas).
Los datos obtenidos muestran que dos especies, el ropit (Erithacus rubecula) y la curruca capirotada (Sylvia atricapilla), suman 425 ejemplares y suponen casi el 80 por ciento del total de capturas durante la campaña, por lo que han sido las dos especies principales en migración durante aquellos días por sa Dragonera.
La migración postnupcial llevará a gran parte de la población de aves del centro y norte de Europa a sus lugares de invernada, que se sitúan en el Sur de Europa y en África.
El Consell ha destacado las propias características de esta migración, que es diferente a la que se realiza en primavera porque se alarga en el tiempo y la realizan muchas más aves, ya que incluye a los jóvenes nacidos el mismo año. Además, para algunas especies existen también diferencias entre el paso prenupcial y el postnupcial, puesto que no emplean la misma ruta de ida que de vuelta.
La vicepresidenta del Consell y consellera insular de Sostenibilidad y Medio Ambiente, Aurora Ribot, ha destacado que "esta campaña de seguimiento de pájaros permite conocer el estado en el que se encuentra la avifauna que pasa por el Parque Natural de sa Dragonera y otros datos relacionados con la migración".
"Poder realizar estudios poblacionales, tanto de las aves migratorias como de las residentes en el parque, es clave para la gestión del espacio y por este motivo seguimos promoviendo este tipo de estudios científicos", ha añadido.
En la misma línea se ha expresado la directora insular de Medio Ambiente, Inmaculada Férriz, que ha resaltado también que "en multitud de estudios de biodiversidad es frecuente la toma de datos de individuos en particular, ya que así se obtienen valiosos datos que permiten comprender mejor su biología, la estructura de la población o su vinculación con los hábitats que ocupan".
A todas las aves se les ha marcado con un eslabón metálico y los datos recogidos de cada pájaro han sido la especie, el sexo, la edad, la longitud de las alas, la grasa, el músculo y el peso.
