Abdalá II aprueba una remodelación del Gobierno de Jordania que incluye seis ministros nuevos

MADRID, 9 May. (EUROPA PRESS) -

El rey Abdalá II de Jordania ha aprobado este jueves una remodelación del Gobierno que incluye seis caras nuevas, en la tercera modificación del Ejecutivo desde que el primer ministro, Omar al Razaz, asumiera el cargo hace un año.

Una de las figuras más destacadas del nuevo Gobierno es Salamé Hamad, quien ha sido nombrado ministro del Interior --en sustitución de Samir al Mobaidín--, un cargo que ya ocupó en dos ocasiones en el pasado.

Asimismo, otra de las caras nuevas es Nidal al Batainé, al frente de Trabajo, y Saad Jaber, nuevo ministro de Sanidad, según ha informado la agencia estatal jordana de noticias, Petra.

Por otra parte, Ualid Masri ha sido nombrado ministro de Administración Local; Mozana Gharaibé al frente de Economía Digital; y Mohamad Isis como ministro de Planificación.

Por último, Yasera Ghosé ha sido nombrada secretaria de Estado para Desarrollo Institucional y Sami Daud secretario de Estado para asuntos de la oficina del primer ministro.

Los nuevos ministros han jurado el cargo ante el monarca jordano apenas un día después de que el Gobierno anunciara su dimisión en bloque para facilitar la remodelación, una práctica habitual en la política del país.

Las dimisiones llegaron apenas unos días después de que Abdalá II cesara al jefe de los servicios de Inteligencia y a su asesor de Política e Información, entre otros miembros de su círculo más estrecho de ayudantes, por una presunta conspiración para organizar una protesta sin precedentes frente al Palacio Real con el objetivo de provocar la destitución de Al Razaz.

Los medios jordanos informaron también de los ceses de algunos jefes de Policía como parte de una cadena de destituciones en defensa de la estabilidad nacional que continuará durante los próximos días.

De acuerdo con estas informaciones, en la cúpula del Gobierno jordano hay una preocupación generalizada tanto por la crisis en la calidad de vida de la población como de las futuras repercusiones que pudiera tener el plan de paz para Oriente Próximo que prepara Estados Unidos, y que podría implicar la concesión de la nacionalidad jordana al millón de refugiados palestinos que acoge.

Jordania ha desmentido categóricamente esta posibilidad, pero el rey Abdulá ha reconocido en ocasiones la gran presión a la que está sometido en lo que a esta cuestión se refiere.

Al Razaz accedió al cargo tras la caída del Gobierno anterior por las protestas del verano de 2018 en respuesta a una versión anterior de la reforma fiscal que ha propuesto ahora el primer ministro, igualmente rechazada en las calles, lo que ha incrementado la presión sobre el Ejecutivo.