KANDAHAR (AFGANISTÁN), 19 Dic. (EP/AP) -
Milicianos talibán decapitaron a un hombre y apuñalaron mortalmente a otro, antes de colgarlo de un árbol, para advertir a sus vecinos de las consecuencias de dar información al Gobierno o a las tropas de la OTAN sobre sus actividades, informó hoy un testigo del incidente, Lal Jan.
Según explicó Jan, los milicianos llevaron ayer a un joven hasta el mercado central de Talukan, localidad de la provincia de Kandahar 8sur del país), y le apuñalaron. Después colgaron su cuerpo de un árbol y decapitaron a otro hombre. Los milicianos dijeron a los residentes que estos hombres habían estado espiando a los talibán, y advirtieron de que los asesinatos eran una lección para aquellos que cooperen con el Gobierno o las fuerzas de la OTAN, indicó el testigo.
Por otra parte, siete combatientes talibán, incluyendo un comandante regional, fueron detenidos anoche en la provincia de Zabul, explicó el jefe de la Policía provincial, Noor Mohamed Paktil.
Por su parte, la Fuerza Internacional de Asistencia a la Seguridad en Afganistán (ISAF) explicó hoy en un comunicado que sus hombres lanzaron una ofensiva durante la noche contra un "conocido mando insurgente y puesto logístico" en una zona aislada del distrito de Panjwayi, en Kandahar.
Un portavoz de la ISAF, el comandante Dominic Whyte, aseguró que se desconoce el número de combatientes que murieron en la ofensiva, que formó parte de la Operación Baaz Tsuka, que pretende expulsar a los talibán de los distritos de Panjwayi y Zhari.
