MADRID, 18 Sep. (EUROPA PRESS) -
Colectivos de agricultores búlgaros han llevado a cabo este lunes una protesta a nivel nacional en el marco de la que, con tractores e incluso cadenas humanas, han bloqueado carreteras y caminos en protesta por el levantamiento de la prohibición de exportación de cereales ucranianos.
El sector agrícola ucraniano ha mostrado su desacuerdo por el cese del veto al grano ucraniano, que con motivo de la guerra ha sido exportado en Europa a precios más bajos, provocando así protestas de los agricultores de los países de la zona y motivando a sus respectivos Gobiernos a tomar cartas en el asunto.
Los bloqueos de carreteras se han producido especialmente en las inmediaciones de la capital búlgara, Sofía, ubicada en el oeste del país. Sin embargo también se han confirmado protestas en el extremo oriental búlgaro, en algunas de las principales ciudades portuarias del país, a orillas del mar Negro.
En estas manifestaciones no solo han participado agricultores, sino también ganaderos, viticultores y apicultores. "El sistema nos está matando", han coreado algunos de los asistentes a la protesta en Ruse, ciudad fronteriza con Rumanía y ubicada a orillas del Danubio, vía fluvial para las exportaciones ucranianas.
"No queremos que haya manipulación de precios porque todos sabemos en las zonas fronterizas que las importaciones realmente no se han detenido", ha reprochado uno de los asistentes a la concentración, según informaciones recogidas por la cadena de radiotelevisión búlgara BNT.
El viticultor Metodi Penchev, uno de los organizadores de la protesta en la ciudad de Burgas (este), ha mostrado su desacuerdo con la importación de cereal ucraniano "a precios más bajos y de mala calidad", pues su venta tan solo hace que "matar al productor búlgaro".
La Comisión Europea levantó la semana pasada las restricciones temporales impuestas a las exportaciones agrícolas ucranianas, mientras que Kiev accedió a adoptar medidas para controlar las exportaciones con el fin de evitar distorsiones del mercado en Polonia, Hungría, Eslovaquia, Rumanía y Bulgaria, los más afectados.
Kiev introducirá así medidas para controlar la exportación de trigo, maíz, colza y semillas de girasol, si bien la población local y los trabajadores agrícolas de los países europeos afectados han instado a sus gobiernos a adoptar medidas unilaterales contra los productos provenientes de Ucrania.
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