MADRID, 6 Feb. (EUROPA PRESS) -
Un joven argelino perteneciente a la comunidad mozabita --grupo étnico bereber-- ha fallecido este miércoles en la localidad de Ghardaia tras ser tiroteado en el barrio de Baba Ouldjemba, elevando a cuatro el número de muertos en la ciudad en los enfrentamientos registrados desde principios de año.
El suceso ha tenido lugar en medio de las denuncias de activistas pro Derechos Humanos de que radicales suníes están llevando ataques contra chiíes y bereberes de la localidad con el respaldo de las fuerzas de seguridad.
"Hay una impunidad total. Cuatro hombres han sido asesinados y la Policía no ha arrestado a nadie", ha dicho el activista Kamel Eddine Fejar, según ha informado el diario argelino 'El Watan'. Asimismo, ha indicado que la Policía "anima con su complicidad" a que los ataques continúe.
En un principio, los enfrentamientos estallaron entre miembros de las comunidades malikita --una de las escuelas jurídicas del Islam suní-- e ibadí --perteneciente a la rama del jariyismo--, y en el marco de los mismos más de 30 locales y espacios públicos fueron asaltados y saqueados.
Las fuerzas de seguridad se han desplegado principalmente frente a los edificios públicos, si bien no han intervenido para poner fin a los sucesos, en los que algunos suníes radicales han incrementado sus ataques y agresiones.
