KABUL, 20 Dic. (Reuters/EP) -
Las autoridades locales afganas han advertido de que la provincia de Helmand, en el sur del país, está "al borde" de acabar en manos de los talibán tras los intensos combates de los últimos meses.
Solo en los dos últimos días han muerto más de 130 integrantes de las fuerzas de seguridad afganas durante los combates contra los talibán, de acuerdo con el vicegobernador de la provincia, Mohamad Jan Tasulyar, quien ha pedido en público al presidente Ashraf Ghani que tome medidas urgentes.
"Su Excelencia, Helmand está al borde del abismo y es necesario que venga aquí", ha escrito Rasulyar en su muro de Facebook. Se trata de un inusual aviso público a las autoridades centrales para recordar que Helmand es un punto estratégico fundamental al tratarse de uno de los centros principales de producción de opio, fuente de ingresos de los talibán.
Desde la Policía se ha restado importancia a la solicitud del vicegobernador. "Tenemos un importante contingente en Helmand. Abandonamos algunas zonas por razones tácticas pero todas nuestras fuerzas están cooperando muy bien y muy pronto alcanzaremos grandes logros en este sentido", ha declarado el jefe de Policía Abul Rahman.
El vicegobernador, sin embargo, añade que el problema va mucho más allá de la disposición de las fuerzas y describe un caos total. "No somos capaces de hacer llegar a tiempo comida ni munición a nuestros soldados, no somos capaces de evacuar a nuestros soldados heridos o muertos y las fuerzas extranjeras se limitan a contemplar la situación desde sus bases sin darnos apoyo", ha escrito.
El vicegobernador detalla que ciudades como Sangin están "al borde del colapso" tras registrar 44 muertos esta pasada noche entre las filas de las fuerzas afganas. En Gereshk, desde el pasado jueves, han fallecido 90 miembros de las fuerzas de seguridad. Los talibán, a pesar de la división actual existente entre sus filas por un polémico proceso de sucesión, no han cejado en su empeño.
