Anuncia que una misión de su oficina irá la semana que viene a Venezuela para hacer una evaluación
MADRID, 6 (EUROPA PRESS)
La Alta Comisionada de la ONU para los Derechos Humanos, Michelle Bachelet, ha lamentado la "espiral" de violaciones de los derechos fundamentales, crisis económica y social, protestas y represión en la que está inmersa Venezuela, al tiempo que ha reconocido que esta se ha visto agravada por las sanciones que pesan sobre el país.
"La situación en Venezuela claramente ilustra el modo en que las violaciones de los derechos civiles y políticos --incluida la falta de respeto de las libertades fundamentales y la independencia de instituciones clave-- puede acentuar un declive de los derechos económicos y sociales", ha resaltado durante su intervención ante la 40 sesión del Consejo de Derechos Humanos de la ONU.
En opinión de la expresidenta chilena, "también muestra cómo ese rápido deterioro de las condiciones económicas y sociales hizo emerger incluso más protestas, una mayor represión y más violaciones de los derechos civiles y políticos" provocando "una espiral de tendencias fuertemente negativas y aceleradas". Según Bachelet, "esta situación se ha visto exacerbada por las sanciones".
La jefa de Derechos Humanos de la ONU ha subrayado que "la resultante crisis política, económica, social e institucional actual es alarmante", al tiempo que también se ha referido a las "graves consecuencias" que está teniendo para los países de la región "el número sin precedentes de venezolanos empujados a dejar sus hogares y el país". Según los últimos datos de la ONU, 3,5 millones de venezolanos han abandonado el país en los últimos años.
Posteriormente, ha desvelado que ha sido invitada a acudir a Venezuela y ha confirmado que una misión de su oficina irá al país la próxima semana "para hacer una evaluación del país.
"Siempre que me invitan a un país, antes de ir a ese país, quiero asegurarme de las condiciones de mi visita garanticen que puedo desempeñar mi papel como debería, que puedo ir y hablar con todo el mundo", ha manifestado
"De otro modo sería inútil. Quiero decir, sería inútil ir a un país y una vez allí no poder reunirme con cualquiera con quien necesite reunirme", ha señalado, antes de agregar que eso "sería un fracaso de su función".
Así, ha explicado que, como Alta Comisionada de la ONU para los Derechos Humanos "tiene que estar segura de que puedo realizar un informe completo y no uno sesgado". "Entretanto, continuamos monitorizando la situación desde Panamá, donde tenemos un mandato del Consejo de Derechos Humanos", ha zanjado.
