BRUSELAS, 14 Mar. (EUROPA PRESS) -
El presidente de la Comisión Europea, Jose Manuel Durao Barroso, ha garantizado al primer ministro italiano, Silvio Berlusconi, que puede contar con "la solidaridad" de los Veintisiete en caso de que haya que atender un aumento del flujo de inmigrantes irregulares procedentes de países que están viviendo o han vivido revueltas sociales importantes como Libia, Túnez o Egipto.
"Italia está en primera línea de lo que está ocurriendo en las costas del Sur del Mediterráneo. Y existen preocupaciones legítimas sobre el hecho de que estos acontecimientos pueden exceder la capacidad de un único país", ha asegurado el ex primer ministro portugués en declaraciones a la prensa tras reunirse este lunes en Roma con el primer ministro, Silvio Berlusconi.
Barroso ha garantizado que "Italia puede contar con la solidaridad política y también financiera de nuestra Unión" después de que los jefes de Estado y de Gobierno de la UE acordaran "dos mensajes": "Europa quiere apoyar estos acontecimientos históricos en el sur del Mediterráneo y que Europa está preparada para mostrar la solidaridad y reparto de la carga con aquellos especialmente expuestos".
"Estoy muy contento sobre este compromiso porque, personalmente y el resto de la Comisión, hemos pedido aumentar la solidaridad y el reparto de carga durante mucho tiempo", ha subrayado el jefe del Ejecutivo comunitario.
Tras celebrar el respaldo de los líderes europeos a la propuesta del Ejecutivo comunitario de impulsar "un pacto por la democracia y la prosperidad compartida en el Mediterráneo" con el que apoyar las reformas democráticas en los vecinos de la ribera sur, Barroso ha dejado claro que "Europa está del lado de aquellos que luchan por más libertad y un futuro mejor".
"Europa quiere ayudar a que estas transformaciones verdaderamente históricas tengan éxito. El Mediterráneo debe unirnos, no dividirnos", ha concluido.
La UE desplegó un equipo de expertos en gestión de fronteras el pasado mes poco después de la llegada de más de 5.000 inmigrantes tunecinos que huían de las revueltas sociales en su país y, aunque el flujo se ha reducido en las últimas semanas, la campaña de represión del régimen libio contra la población civil que ha impulsado el régimen libio ha provocado el temor a una nueva ola de inmigrantes irregulares. Muchos tunecinos y egipcios que entraron en Libia huyendo de la violencia en sus países se encuentran bloqueados en la actualidad en la frontera con Libia.
Barroso también tiene previsto reunirse este lunes con el presidente de la República, Giorgio Napolitano, y con el presidente del Banco Central italiano, Mario Draghi, uno de los aspirantes a suceder al actual presidente del Banco Central Europeo, Jean-Claude Trichet.
