YANGON (BIRMANIA), 27 (EP/AP)
La Junta Militar de Birmania ha incinerado más de 1.000 millones de heroína y otras drogas en una hoguera gigante delante de numerosos diplomáticos extranjeros como muestra de su compromiso en la lucha contra las drogas y para limpiar su imagen como paraíso del narcotráfico.
Representantes de Tailandia, China, Filipinas y Japón, así como otros países asiáticos, atendieron a la ceremonia ayer miércoles en el noreste del país, donde los oficiales de narcóticos incineraron una enorme mezcla de narcóticos confiscados desde principio de año.
La hoguera prendió 55 kilos de heroina, 1.000 kilos de opio, miles de pastillas estimulantes y miles de litros de productos químicos empleados para hacer drogas.
El general Khin Yi afirmó que los narcóticos que ardieron en la ciudad de Keng Tun, a 60 kilómetros de la frontera con Tailandia, fueron incautados en cooperación con las autoridades chinas y tailandesas.
"Myanmar --nombre con el que la Junta designa a Birmania-- seguirá haciendo lo mejor que pueda para superar la amenaza de las drogas en el país y en la comunidad internacional en su totalidad", afirmó.
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