La causa independentista vence en Montenegro en un referéndum calificado de "democrático" por Europa

Actualizado: martes, 23 mayo 2006 2:01


PODGORICA, 23 May. (EUROPA PRESS) -

La causa independentista en Montenegro logró la victoria en el referéndum celebrado el domingo en el país, con un total de 219.683 votos --el 55,4% de los ciudadanos que acudieron a las urnas-- y con una participación del 86,3%, según los datos oficiales publicados hoy por la Comisión del Referéndum. Por otro lado, los observadores internacionales ratificaron que la votación se celebró de manera democrática.

De esta manera el país ha superado en cuatro décimas el umbral mínimo del 55% fijado por la Unión Europea (UE) para considerar válida la consulta. En este sentido, el alto representante de la Unión Europea para la Política Exterior y la Seguridad Común (PESC), Javier Solana, felicitó ayer al pueblo y al gobierno de Montenegro por el desarrollo del referéndum y aseguró que la UE respetará "completamente" el resultado de la consulta.

Montenegro será a partir de ahora el Estado europeo número 48, según el criterio del Consejo de Europa, que cuenta con 46 miembros, desde Islandia hasta Azerbaiyán, y una solicitud de ingreso, la de Bielorrusia. En la ONU, será el socio número 192, el primer Estado de nueva creación desde la independencia de Timor Oriental en 2002.

El presidente de la Comisión de Referéndum, Frantisek Lipka, anunció ayer que el organismo está todavía a la espera de recibir los datos de 45 colegios electorales, lo que significa que la decisión de cerca de 25.000 ciudadanos todavía es desconocida. Preguntado por los periodistas sobre si los votos sin procesar podrían influir en los resultados finales del referéndum, Lipka aseguró que aunque podrían producirse algunos cambios, éstos no serían trascendentales.

Asimismo, el responsable hizo hincapié sobre el hecho de que la Comisión no ha recibido ninguna queja sobre el proceso, destacando que solamente un 0,87 de los votos han sido nulos.

UN PROCESO DEMOCRÁTICO

También los 365 observadores de 35 países desplazados a Montenegro dictaminaron ayer que el proceso de consulta se llevó a cabo "en su conjunto" de acuerdo con los estándares internacionales para una proceso democrático, además de proporcionar a los montenegrinos una "auténtica oportunidad" para decidir sobre su futuro mediante un "proceso de democracia directa".

La misión internacional está compuesta por observadores de la Organización para la Cooperación y la Seguridad en Europa (OSCE), del Consejo de Europa y del Parlamento Europeo. Según el jefe de la delegación de la Asamblea Parlamentaria de la OSCE, Nevzat Yalcintas, hay que felicitar a los montenegrinos por haber celebrado "un referéndum genuino y transparente" y por su "enfoque constructivo a la hora de tomar esta decisión histórica".

Para el jefe de la delegación de la Asamblea Parlamentaria del Consejo de Europa, Jean-Charles Gardetto, "la alta participación demostró la importancia que dan los montenegrinos a decidir su futuro por medios democráticos y pacíficos". "Expresaron su voluntad libre de una manera plenamente democrática y civilizada, algo de lo que pueden estar orgullosos y que fija un ejemplo para la región", añadió.

Por su parte, el responsable de la delegación del Parlamento Europeo, Jelko Kacin, dijo sentirse "positivamente impresionado por la regularidad y la eficiencia del proceso de referéndum". Asimismo, hizo un llamamiento a "todos los ciudadanos de Montenegro para que trabajen juntos para un futuro brillante y común". "Su futuro está en la integración europea y a este respecto, todos ellos son vistos como ganadores", añadió.

Kacin consideró además que "Serbia y Montenegro deberían cooperar estrechamente para el reconocimiento mutuo de los resultados del referéndum, para una decisión consensuada sobre los próximos pasos a seguir y para una rápida reanudación de las negociaciones para un Acuerdo Asociación y Estabilización, sobre la base de los propios méritos de cada república", concluyó.

FUTURO EUROPEO

Por otro lado, la Comisión Europea aseguró ayer que propondrá discutir con Montenegro un nuevo Acuerdo de Estabilización y Asociación --primer paso para entrar en la UE-- separado del que negociaba hasta ahora con Serbia, que se encuentra paralizado porque las autoridades de Belgrado no han entregado al general Ratko Mladic, acusado de crímenes de guerra, al Tribunal Penal Internacional para la antigua Yugoslavia (TPI).

De esta manera, cuando la UE y Serbia reconozcan de manera oficial los resultados, el Parlamento montenegrino proclamará la independencia del nuevo Estado. Según indicó el delegado de la UE en Montenegro, Miroslav Lajcak, en dos semanas, la cámara podría declarar formalmente una independencia que la UE reconocerá "si todo se desarrolla sin problemas".

Por su parte, ni el presidente serbio, Boris Tadic, ni el primer ministro, Vojislav Kostunica, se han pronunciado a cerca del resultado de la consulta. Unicamente, el ministro de Asuntos Exteriores del Gobierno de Serbia y Montenegro, Vuk Draskovic, declaró ayer que la independencia es una oportunidad para que Serbia regrese a "sus orígenes históricos" y recupere la monarquía parlamentaria.

"Creo que éste es un momento histórico para que Serbia regrese a sus orígenes históricos, que están cimentados en la historia, cuando intentó y consiguió establecer los pilares del Estado serbio, los pilares de un reino", declaró.

"Ésta es una oportunidad para que Serbia recupere algo que acortará nuestro camino hacia Europa: una monarquía constitucional y parlamentaria. El pueblo serbio no debe dejar escapar esta oportunidad", añadió, citado por la cadena de radio independiente serbia B92.

Según quedó establecido en la carta de fundación de la unión de Serbia y Montenegro, a partir de ahora, Serbia será el estado sucesor de la antigua unión y Montenegro tendrá que iniciar los procesos de incorporación a la UE y la ONU así como al resto de organismos internacionales.

Serbia seguirá también en la negociación sobre su provincia de mayoría albanesa, cuyo futuro estatus será determinado a finales de este año. Sin embargo, tras la independencia, Belgrado perderá su acceso directo al Mar Adriático lo que concede a Montenegro una posición más fuerte de cara a las futuras conversaciones en torno al reparto reparto de los recursos de la unión.

Libre de la gran hermana Serbia, Montenegro se enfrentará a un camino más fácil de cara a su futura adhesión a la UE, pero tendrá que demostrar su capacidad para desarrollar una economía viable que alcance las estrictas reformas exigidas por los Veinticinco como condición para entrar a formar parte de la organización.

El primer ministro montenegrino, Milo Djukanovic, ha acusado durante años a Serbia de pisar a Podgorica y bloquear su progreso económico, así como su integración internacional. No obstante, ambos estados desarrollaron una economía dependiente del mercado negro desde la difícil década de 1990, cuando Serbia y Montenegro se enfrentaron a sanciones internacionales por su papel en las guerras de los Balcanes.

Esa economía permitió a Montenegro sobrevivir al mandato del ex líder serbio Slobodan Milosevic pero destrozó la mayor parte de su industria. La renta per cápita del país se sitúa en 780 euros mientras que el salario mensual medio es de 195 euros y la tasa de desempleo alcanza el 30%.

Con la independencia y la llegada de la estabilidad política, Montenegro espera que el número de turistas que visiten el país este año ascienda hasta los 600.000, el doble de los recibidos el año pasado. El país tendrá asimismo que crear su propio Ejército profesional, hasta ahora compartido con Serbia. Ambos países han permanecido unidos bajo distintas fórmulas desde 1918. El actual Estado nació en 1992 con el nombre de República Federal de Yugoslavia.