Chipre asume la presidencia rotatoria de la Unión Europea

MADRID 2 Jul. (EUROPA PRESS) -

Chipre ha recibido el relevo de Dinamarca para presidir el Consejo Europeo durante el segundo semestre de 2012. En un acto celebrado en Madrid, el embajador chipriota, Antonis Toumazis, ha afirmado que uno de los objetivos será crear una Europa "más efectiva" y "cercana a los ciudadanos".

Durante el acto, en el que se ha arriado la bandera danesa y se ha izado la chipriota, el embajador ha dicho que vivimos "tiempos de cambio" en los que la crisis económica que atraviesa la Unión Europea se ha convertido en una "crisis de nuestras instituciones y nuestros valores".

Ante esta situación, ha declarado, Chipre quiere construir durante los próximos seis meses una Europa "más efectiva" y "más cercana a los ciudadanos", además de aumentar la presencia de la UE en el mundo, en particular en su entorno, dados los cambios experimentados por el mundo árabe en el último año y medio.

La embajadora de Dinamarca en España, Lone Wisborg, ha señalado que si bien "aún queda mucho camino para salir de la crisis", su país ha comprobado durante el último semestre que "la respuesta a los retos actuales es más Europa, no menos Europa".

En este contexto, ha destacado que el nuevo pacto de la UE para fomentar el crecimiento y la creación de empleo "culmina el trabajo de la presidencia danesa y marca un nuevo rumbo" para los Veintisiete.

El secretario de Estado de España para la Unión Europea, Íñigo Méndez de Vigo, ha afirmado que está "convencido" de que la de Chipre será "una buena presidencia" pese a ser un país pequeño. "En Europa todos los países son pequeños, aunque algunos no se hayan dado cuenta todavía", sobre todo con la "globalización", ha indicado.

En su opinión, Chipre tiene por delante dos tareas principales, la primera de las cuales es cerrar un acuerdo sobre el Marco Financiero Plurianual para el periodo 2014-2020. "Necesitamos un presupuesto que de verdad responda a las necesidades de la UE", ha subrayado.

La segunda tarea de la presidencia chipriota debe ser, según Méndez de Vigo, "ejecutar los acuerdos del Consejo Europeo", que "demuestran la voluntad de los europeos" por mantenerse "unidos", por conservar el euro como moneda y por "una Europa políticamente más integrada".

El Gobierno chipriota se ha fijado cuatro prioridades principales para este semestre: conseguir una Europa "más eficiente y sostenible", promover "una economía basada en el crecimiento y con mejor rendimiento", aumentar el papel de la UE en la vida de sus ciudadanos y acercar a Europa a los países de su entorno.