GONDOMIL (PORTUGAL), 28 Mar. (Reuters/EP) -
Cientos de bomberos portugueses han luchado este miércoles para contener los incendios forestales que se han producido mucho antes de lo habitual debido al clima caluroso y con viento inesperado.
Diez incendios han estallado en todo el país, la mayoría en el norte, varios meses antes del final de la temporada de primavera, cuando los equipos de bomberos suelen dedicarse más a este tipo de fuegos. Los meteorólogos han señalado que el calentamiento global ha dificultado predecir dónde se producirán los incendios.
"Estamos teniendo importantes brotes de incendio en zonas donde no sabíamos que el riesgo era alto", ha subrayado Miguel Miranda, presidente del Instituto Portugués de Meteorología (IPMA), a la emisora local TSF. "Estamos en un territorio inexplorado. Nunca hemos pasado por esto", ha aseverado.
Los helicópteros han lanzado agua a los bosques en llamas cerca de un pequeño pueblo de Gondomil, en el extremo norte de Portugal, cerca de la frontera española.
Hasta el momento no se han registrado víctimas ni se han hecho públicas las cifras de daños a la propiedad. El Gobierno de Portugal emitió este martes por la noche una alerta de incendio, sin lluvias previstas y con temperaturas que se han elevado al comienzo de esta semana hasta los 28 grados, muy por encima de lo habitual.
Las condiciones climáticas se asemejan a las que causaron un devastador incendio forestal en la ciudad de Pedrogao Grande en junio de 2017, que acabó con la vida de 64 personas e hirió a más de 250, considerado el peor desastre en la historia moderna del país.
Las advertencias del Gobierno prohíben a los granjeros usar métodos de tala y quema y pide a los empleadores que autoricen que sus trabajadores se ausenten si sirven como bomberos voluntarios.
Además, el IPMA ha advertido que se espera que las temperaturas continúen siendo inusualmente altas.
"Este escenario meteorológico significa un aumento en el índice de riesgo de incendio de lunes a miércoles con condiciones favorables para la rápida propagación de fuegos en todo el continente, con niveles altos a muy altos", ha subrayado la agencia de protección civil a través de su página web.
El incendio forestal más agresivo se desató en el municipio de Oliveira de Azemeis desde las primeras horas de la mañana del martes, con 450 bomberos en el terreno.
En el distrito de Esposende, también en el norte de Portugal, un incendio forestal este martes obligó a las autoridades a evacuar dos colegios debido a los altos niveles de humo.
