SINGAPUR, 2 Jun. (EP/AP) - El Gobierno surcoreano transmitió hoy un mensaje de paciencia sobre las difíciles negociaciones sobre el programa de armamento nuclear del régimen de Corea del Norte, pero también condicionó cualquier tipo de ayuda humanitaria que reciba Pyongyang a que ésta comience a desactivar sus principales reactores de energía.
"A pesar de las complicaciones y dificultades, las negociaciones multilaterales nos abren una ventana de oportunidad para resolver el problema nuclear norcoreano, y para acomodar un nuevo orden de paz y seguridad en la región", afirmó el ministro de Defensa surcoreano, Kim Jang-soo, al término de un foro de seguridad regional en Singapur.
"El proceso de desnuclearización de la península coreana solo tendrá éxito cuando todas las partes en las conversaciones adopten una postura paciente y de cooperación mutua", declaró.
Sin embargo, el ministro también defendió la reciente decisión de Seúl por la que queda suspendido un envío de arroz hasta que el régimen comunista comience a desmantelar su programa nuclear, incluidas las instalaciones que se cree producen material armamentístico de dicha índole. A pesar de dicha cancelación, Kim dejó claro que Corea del Sur esperaba reanudar sus tareas humanitarias lo antes posible.
