MADRID, 6 Ago. (EUROPA PRESS) -
El principal sospechoso del asesinato de siete miembros de una familia kurda el pasado fin de semana en la provincia turca de Konya ha sido detenido tras seis días a la fuga por su presunta responsabilidad en unas muertes que han conmocionado a la sociedad del país.
El sospechoso ha sido identificado como Mehmet Altun, y ha sido capturado en el cementerio de Bozkir, en esta misma localidad, con un arma y 18 balas. Ahora mismo está siendo interrogado por las autoridades.
Desde el incidente, la Policía ha detenido a 14 personas y diez de ellas, incluyendo a la mujer y los padres del principal sospechoso, se encuentran bajo disposición judicial.
Según el relato oficial de la investigación, Altun abrió fuego tras una discusión contra los miembros de la familia Dedeoglu, entre ellos mujeres y niños, ejecutó a los que languidecían heridos por los disparos y después intentó quemar su casa.
"Me empezaron a gritar, así que les disparé", confesó Altun a las autoridades, en declaraciones recogidas por el diario 'Hurriyet'. El sospechoso afirmó que había entrado en su domicilio con una máscara en la cara y haciéndose pasar por un funcionario municipal "para reconciliarse" tras un acto de "hostilidad" entre dos familias, que databa de once años, según la Fiscalía.
Según las informaciones recogidas por la cadena de televisión kurda Rudaw, las víctimas fueron objetivo en mayo de 2021 de un ataque por parte de sus vecinos, en el marco de un aumento de los ataques y las agresiones contra miembros de la comunidad kurda en Turquía.
Estos ataques tienen lugar en un contexto en el que las autoridades han cesado en los últimos meses a decenas de alcaldes del prokurdo Partido Democrático de los Pueblos (HDP) por cargos de "terrorismo" y les han reemplazado con funcionarios estatales, en el marco de la campaña de represión contra los consejos locales controlados por este partido opositor, el tercero con más representantes en el país.
Asimismo, el Ejército turco ha intensificado sus operaciones contra el Partido de los Trabajadores del Kurdistán (PKK) tanto en el país como en el norte de Irak --donde la formación cuenta con numerosas bases-- desde que quedó roto el alto el fuego entre el Gobierno y el grupo armado en julio de 2015.
