NUEVA YORK, 15 Jun. (EUROPA PRESS) -
Estados Unidos ha emitido un nuevo aviso de seguridad para los estadounidenses que viajan a Filipinas ante la posibilidad de nuevos ataques terroristas, especialmente en las zonas de Mindanao y Sulú, en el sur del archipiélago, donde una insurgencia islamista con lazos con Al Qaeda sigue en activo.
El Departamento de Estado actualizó el martes en su página web las advertencias que deben tener en cuenta los estadounidenses que viajan a Filipinas ante la posibilidad de ataques terroristas y actos de combatientes insurgentes.
"Los objetivos podrían ser lugares donde se concentra la gente, incluidos los aeropuertos, centros comerciales, centros de conferencias y otras zonas públicas", recoge el Departamento en un comunicado.
"Los visitantes deben extremar la precaución si viajan a Mindanao o al archipiélago de Sulú", señala la nota, que extiende la precaución a todo Mindanao después de que en noviembre advirtiese de que los turistas deberían tomar precauciones en la zona central y el oeste de esta isla.
"Los ataques terroristas pueden ser indiscriminados y pueden ocurrir en cualquier parte, incluso en Manila", indica el comunicado.
El Departamento de Estado señala que se han producido ataques de grupos terroristas regionales que han provocado heridos y muertos y que el Ejército filipino se enfrenta esporádicamente a grupos insurgentes en Mindanao. Además, en el comunicado se indica que los empleados del Gobierno de Estados Unidos deben pedir permiso especial para poder viajar a Mindanao y a Sulú.
El principal grupo rebelde musulmán de Filipinas, el Frente Moro de Liberación Islámica (MILF, por sus siglas en inglés), opera en la parte sur del país en el marco de un conflicto de 40 años que ha causado la muerte de 120.000 personas y el desplazamiento de dos millones.
