Nueva York, 24 Abr. (del corresponsal de EUROPA PRESS Carlos López) -
El Congreso de Estados Unidos ha encargado a James Baker, el que fuera ex secretario de Estado durante el Gobierno de George H. W. Bush, la labor de asesorar y generar nuevas ideas en relación a la gestión de la guerra en Irak para lo cual se trasladará en breve a la región con el objetivo de reunirse con jefes de Estado de la región.
Según publica hoy 'The New York Times', la operación cuenta con las bendiciones del presidente estadounidense, George W. Bush, de su padre y ex presidente George H. W. Bush, y de la secretaria de Estado, Condoleezza Rice. Baker dirigirá el denominado Grupo de Estudio para Irak y podría ser interpretado como la primera señal de que la Administración reconoce la necesidad de ayuda en la gestión de la guerra.
"Si tienes un problema de salud, sueles querer una segunda opinión de otra persona", señaló al periódico el representante republicano por Virginia Frank R. Wolf, quien ayudó a reclutar a Baker para el trabajo. "Lo que Estados Unidos necesita de Irak es ideas frescas de gente capaz de hablar claro.
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