MADRID, 19 Abr. (EUROPA PRESS) -
El Gobierno español ha manifestado este domingo su "gran consternación" por la noticia del naufragio de una embarcación que podría haber causado la muerte de unas 700 personas. El barco se hundió al sur de la isla de Lampedusa, al norte de Libia.
"España ha recibido con gran consternación las noticias relativas a un nuevo naufragio en el Mediterráneo. Si se confirman los pronósticos, la cifra de desaparecidos podría alcanzar casi los 700 que, sumados a los 500 de la semana pasada, supondría más de 1.000 muertes en el Mediterráneo en una sola semana", indica en un comunicado el Ministerio de Asuntos Exteriores y de Cooperación en un comunicado.
El Ejecutivo recuerda "en una fecha tan trágica" que la inmigración es "uno de los mayores retos del siglo XXI", aunque no es un reto "nuevo". "Los países ribereños del Mediterráneo llevamos tiempo trabajando para hacer frente a estas tragedias que se suceden cada vez con mayor frecuencia, ante la inestabilidad política y la pobreza en los países de origen", argumenta.
Ante esta situación, España "exige una respuesta unida y reforzada de la Unión Europea y de sus Estados miembros y del conjunto de la comunidad internacional".
