TEGUCIGALPA, 13 Ago. (EUROPA PRESS) -
El Tribunal Supremo Electoral de Honduras (TSE) dio luz verde a los partidos políticos para que comiencen la campaña electoral el próximo 31 de agosto, con miras a los comicios presidenciales que se celebrarán el 29 de noviembre.
A pesar de que varios países del continente han advertido de que no reconocerán los resultados de esas elecciones, Honduras se prepara para lo que podrían ser los comicios más importantes en los últimos 20 años.
Según el TSE, unos 4,2 millones de hondureños están convocados a las urnas en noviembre para elegir a un nuevo presidente, diputados, senadores, miembros del Parlamento Centroamericano (Parlacen), alcaldes y vicealcaldes.
"Esperamos que sea una campaña de proposiciones, que la ciudadanía pueda conocer las políticas públicas de los candidatos para gobernar el país los próximos cuatro años", informó el presidente del organismo, Saúl Escobar.
Los candidatos con más peso son Elvin Santos del Partido Liberal, al que pertenece el derrocado mandatario Manuel Zelaya, y Porfirio Lobo del Partido Nacional de Honduras, que representa a la oposición hondureña.
La más reciente encuesta de la empresa CID-Gallup reveló que Lobo podría ganar las elecciones presidenciales porque cuenta con el 42 por ciento de las preferencias, mientras que en segundo lugar quedaría Santos con el 37 por ciento.
El sondeo también desveló que el 42 por ciento de los hondureños ha expresado su interés en participar en los comicios del próximo noviembre, a pesar de la crisis política que vive el país desde el pasado 28 de junio cuando Zelaya fue derrocado y se instaló un Gobierno interino encabezado por Roberto Micheletti, miembro también del Partido Nacional.
La campaña comienza el 31 de agosto y deberá concluir cinco días antes de los comicios para entrar en el período que se conoce como "silencio electoral". El TSE publicará en los próximos días una normativa que regulará los anuncios en prensa, radio y televisión de los partidos políticos participantes.
El organismo espera la participación de unos 20.000 observadores nacionales y extranjeros, sin incluir a los de la Organización de Estados Americanos (OEA), que aún no ha confirmado su presencia y que ha expresado su reiterado rechazo al Gobierno de Micheletti, informó la prensa local.
