YAKARTA, 11 May. (EP/AP) -
Indonesia levantará con toda probabilidad muy pronto los cargos por corrupción que pesan contra el ex dictador Suharto, que se encuentra convaleciente en un hospital, según indicó hoy el secretario del Estado, Yusril Ihza Mahendra, que visitó al ex dirigente, de 84 años, en el centro médico.
Según Mahendra, el Gobierno también ha decidido adoptar medidas para "rehabilitar" el nombre del ex dictador. "Si Dios quiere, el fiscal general emitirá muy pronto una orden declarando el fin de la investigación", señaló el responsable indonesio, que visitó a Suharto en el hospital de Yakarta en el que se recupera de una operación de colon.
Mahendra, que anteriormente escribió discursos para Suharto, ha recibido el encargo del presidente indonesiio, Susilo Bambang Yudhoyono, de recabar documentos relativos al estatus legal, financiero y de salud de Suharto antes de tomar una decisión sobre qué hacer con el caso del ex dictador.
Suharto fue derrocado tras 32 años en el poder en 1998 en medio de protestas estudiantiles y disturbios en todo el país. En 2000, los fiscales le acusaron de malversar 600 millones de dólares (470 millones de euros), pero nunca compareció ante ningún tribunal después de que sus abogados alegaran que varios infartos cerebrales le habían provocado daños irreversibles.
Sus últimos problemas de salud parecen haber empujado al Gobierno, muchos de cuyos miembros gozaron de riqueza, poder y privilegio bajo el régimen de Suharto, a reexaminar su estatus legal con vistas a limpiar su nombre. Sin embargo, sus detractores dicen que Suharto debería ser acusado en relación con unos 500.000 asesinatos políticos bajo su régimen, en su mayoría de opositores comunistas y de izquierda.
