Irak.- El cadáver del soldado salvadoreño en Irak llega a la base militar de Ilopango

BASE MILITAR ILOPANGO (EL SALVADOR), 25 (EP/AP)

El presidente Tony Saca y el embajador de Estados Unidos, Douglas Barclay, encabezaron una delegación que recibió los restos mortales de un soldado salvadoreño que murió hace una semana en una emboscada en Irak.

El féretro del subsargento José Miguel Perdomo llegó la tarde del lunes en un avión C-130 de la fuerza aérea de Estados Unidos a una base militar del este de San Salvador.

Perdomo murió el miércoles en una emboscada en la ciudad iraquí de Kut al estallar un artefacto explosivo colocado por insurgentes en las orillas de una carretera. Es el tercer salvadoreño que muere en Irak desde agosto del 2003.

La bandera azul y blanco de El Salvador cubrió el féretro que fue escoltado por seis oficiales hacia un área donde era esperado por el mandatario, el embajador Barclay y la familia.

Tras un breve acto religioso Saca y Barclay acompañaron el féretro y a la familia de Perdomo hasta la puerta de un helicóptero que los trasladó hasta el poblado de San Rafael Oriente, en la región este del país, donde el martes se realizará el acto fúnebre.

"La guerra es difícil, es horrible, es trágica, pero la democracia significa tanto para El Salvador, Los Estados Unidos y el mundo", dijo Barclay en rueda de prensa. "El sargento Perdomo no murió en vano, murió como un héroe", apuntó.

Agregó que "la guerra es bastante peligrosa y debemos orar que nadie más resulte lesionado o muera en Irak".

Tras ser consultado si sigue siendo necesaria la presencia de las tropas salvadoreñas en Irak, Barclay respondió que "por supuesto que sigue siendo necesaria".

"Los Estados Unidos se sienten muy complacidos de que el batallón Cuscatlán este en Irak y estamos esperando de que exista una séptima rotación. Sin embargo, esa decisión debe ser tomada por el gobierno salvadoreño", señaló Barclay.

Saca, quien no habló con la prensa, anunció la semana anterior que se enviará una nueva misión a partir de mediados de agosto. Para Saca se debe "terminar lo que hemos comenzado".