BAGDAD, 25 Jun. (EUROPA PRESS) -
El primer ministro iraquí, Nuri al Maliki, presentará hoy al Parlamento un plan de reconciliación nacional con el fin de poner fin a la ola de violencia que asola al país desde la caída de Sadam Husein. La propuesta de Al Maliki busca sacar de las calles y desarmar a los insurgentes e iniciar el diálogo con grupos rebeldes suníes.
Asimismo, planteará la revisión de la situación de los miembros del Partido Baas de Sadam que fueron retirados de posiciones de poder después de la invasión estadounidense.
Responsables iraquíes han señalado que el plan de 28 puntos ofrecerá la amnistía a algunos grupos insurgentes para que se integren en el actual proceso político gubernamental. Sin embargo, a grupos como Al Qaeda o que han utilizado a civiles como blanco de sus atentados, no se les dará la opción de la amnistía.
Sin embargo, líderes políticos suníes le han dado una cautelosa bienvenida al plan de reconciliación de Al Maliki. El presidente del Parlamento, Mahmud al Mashhadani, señaló que la propuesta no es una "solución mágica", sino un intento de "tapar las grietas" que dividen a Irak.
"El Gobierno está comprometido a acercar a la mesa a todas las facciones y a implementar una reconciliación nacional entre ellas", declaró a la cadena de televisión Al Arabiya.
Mientras, el diputado Salim Abdulá consideró que el plan de Al Maliki sólo funcionará si se le extiende la propuesta de amnistía a la mayor cantidad de grupos posible.
