BAGDAD, 2 May. (EP/AP) -
Al menos dos personas murieron y otras cinco resultaron heridas por la explosión de una bomba colocada en un minibús aparcado en el principal mercado de venta al por mayor de Bagdad, según informó la Policía. Por otra parte, un soldado estadounidense y otros dos civiles iraquíes murieron por la explosión de bombas colocadas en la carretera.
El peor ataque de hoy se produjo en el centro de la capital cuando una bomba colocada en un minibús explotó en Shorja, un mercado en el que los vendedores utilizan almacenes, puestos y tiendas para vender alimentos, ropa y productos para la casa a tiendas y vendedores. Al menos dos iraquíes murieron y otros cinco resultaron heridos, según el teniente coronel Falah al Mohamadwi, policía del Ministerio de Interior.
Previamente, una bomba colocada en una carretera se había cobrado la vida de un soldado estadounidense hacia las 21:50 hora de ayer, a unos 60 kilómetros al sur de Bagdad. La zona forma parte del famoso 'Triángulo de la muerte'. Con esta nueva víctima son ya al menos 2.406 los miembros de las fuerzas estadounidenses muertos desde que comenzó la guerra, según un recuento de Associated Press.
Además, una bomba que tenía como objetivo un convoy norteamericano en Waziriya, al norte de Bagdad, no logró alcanzar su objetivo pero se cobró la vida de un civil iraquí, según el capitán de Policía Ali al-Obeidi. Otra bomba también estalló sin alcanzar a una patrulla de la Policía, pero mató a un civil e hirió a otro en el oeste de Bagdad, según el teniente primero Maithem Abdel-Razaq.
Asimismo, a las 7:30, la Policía encontró los cadáveres de cuatro iraquíes en las calles de Kazimiya, barrio chií en el norte de Bagdad, según el teniente coronel de Policía Falah al Mohammedawi. Los cuerpos tenían las manos y los pies atados y cada uno presentaba disparos en la cabeza, indicó el Ministerio de Interior iraquí. Las víctimas eran hombres de entre 20 y 40 años, todos ellos esposados y con los ojos vendados, indicó la fuente.
Por último, el mando estadounidense informó de que el Tribunal Central Criminal de Irak condenó en abril a doce presuntos insurgentes por unirse a un grupo terrorista. Entre los condenados figuran dos hombres a los que se dictó cadena perpetua por formar parte de Al Qaeda en Irak y participar en sus operaciones. Se trata de Hassan Abdulá Muhsin y Mohamed Dhaher Ibrahim Yassen Jazzah.
