May hablará con el Sinn Fein para tratar de desatascar la situación en la región
LONDRES, 10 (Reuters/EP)
Irlanda y Reino Unido trabajarán con los partidos norirlandeses para tratar de restablecer en cuestiones de semanas el Gobierno en esta provincia británica, según ha contado este viernes el ministro de Asuntos Exteriores irlandés.
La provincia británica lleva sin ejecutivo regional desde hace más de dos años, desde que los nacionalistas norirlandeses del Sinn Fein se retiraron del ejecutivo de obligado reparto de poder con el Partido Unionista Democrático (DUP).
El asesinato de la periodista norirlandesa de 29 años Lyra McKee el 18 de abril por disparos de milicianos del Nuevo IRA durante unos altercados en Londonderry han aumentado la presión sobre los líderes políticos para que vuelvan a restablecer el Gobierno regional.
"Hemos visto el asesinato de Lyra McKee y la tragedia en torno a lo que sucede con un vacío en el que la política no está funcionando", ha afirmado el jefe de la diplomacia irlandesa, en declaraciones a la cadena de radio de la BBC. "Tenemos que corregir esto", ha añadido.
"Irlanda y Reino Unido tienen que trabajar juntos", ha asegurado el ministro de Exteriores británico. "Los Gobiernos británico e irlandés trabajarán juntos estrechamente para intentar conseguir un profundo cambio con los partidos políticos que pueda llegar en semanas, no en meses", ha explicado.
Por su parte, la primera ministra británica tiene previsto hablar en los próximos días con el Sinn Fein en los próximos días para impulsar el restablecimiento del Gobierno regional norirlandés, según ha contado una portavoz de Downing Street.
Los representantes del Sinn Fein y del DUP han retomado esta semana las conversaciones para recuperar el ejecutivo, en su primer intento en más de un año para restablecer la administración norirlandesa, bloqueada desde 2017. May dialogó el jueves con representantes del DUP, el partido unionista que respalda a su Ejecutivo.
El acuerdo de reparto de poder en el Úlster es un punto fundamental de los acuerdos de paz firmados en Irlanda del Norte en 1988, que pusieron fin a décadas de violencia en la región que acabaron con la vida de 3.600 personas.
