NAIROBI, 25 Ene. (EP/AP) -
El hallazgo esta mañana de tres nuevos cuerpos por parte de un socorrista israelí ha elevado a 17 el número de muertos por el hundimiento de un edificio el pasado lunes en Nairobi. Por otra parte, la Policía ha incrementado su operación de captura de los propietarios del edificio, quienes supuestamente presionaron a los obreros para levantar nuevos pisos a pesar de que no habían pasado los 21 días necesarios para que se asentara el hormigón de la primera planta.
Los trabajadores kenianos cuentan con la ayuda de socorristas estadounidenses y británicos en sus tareas de búsqueda de supervivientes. No se tienen informaciones precisas sobre el número de personas que podrían estar atrapadas, en su mayoría obreros que trabajaban en la construcción de este edificio de cinco plantas.
A través de sus familias se han constatado los nombres de diez personas que estaban en el edificio y que hasta el momento no han aparecido. En el accidente se han registrado más de cien heridos. Según el portavoz del Gobierno, Alfred Mutua, no se detecta ninguna sesñal de vida entre los escombros.
Ciertas informaciones indicaron ayer que el accidente se debió a una negligencia durante la construcción. "No habían dejado que pasaran los 21 días habituales para que el hormigón se asentara. Pasó mucho menos tiempo antes de que construyeran una nueva planta", declaró Mutua.
El responsable de investigación criminal de Nairobi, Danson Diru, ha identificado los nombres del propietario del edificio, Jimmy Kihonge, y del contratista de la obra, Francis Gathiara. El hermano del propietario, el abogado Elias Kihonge, aseguró a The Associated Press que Jimmy Kihonge se encuentra en estado de 'shock' y podría entregarse a la Policía.
