BEIRUT, 29 May. (Reuters/EP) -
El enviado especial de la ONU y la Liga Árabe para Siria, Kofi Annan, ha advertido este martes de que Siria se encuentra en un "punto de inflexión" en el que los ciudadanos "no quieren un futuro de derramamiento de sangre", por lo que ha reclamado al presidente del país, Bashar al Assad, que adopte medidas de forma inmediata.
Annan se ha reunido este martes en Damasco con Al Assad, con quien ha hablado "en términos sinceros" sobre la "preocupación de la comunidad internacional" a causa de la violencia en Siria, especialmente la reciente masacre de Hula.
Según Annan, el presidente sirio condenó esta matanza, en la que murieron más de un centenar de personas, y la atribuyó a "terroristas", pese a que la propia ONU señala a las fuerzas del régimen y a las milicias progubernamentales 'Sabhiha'.
"Estamos en un punto de inflexión. El pueblo sirio no quiere que el futuro sea de derramamiento de sangre y división", ha explicado el mediador, quien ha alertado de que "las muertes y los abusos continúan".
Por este motivo, ha reclamado pasos "atrevidos" a Al Assad. "No mañana, ahora", ha apostillado Annan, que propuso un plan de paz hace meses dentro del cual figuraba un alto el fuego. Dicha tregua, que en teoría entró en vigor el pasado 12 de abril, sigue sin cumplirse sobre el terreno.
El enviado de la ONU y la Liga Árabe ha pedido al Gobierno y a sus milicias afines que pongan fin "a todas las operaciones militares" y apuesten por la "contención". Asimismo, ha exigido a los rebeldes opositores que "cesen los actos de violencia".
Durante el encuentro de este martes, Annan y Al Assad también han coincidido en la necesidad de que la ayuda humanitaria llegue a todas las partes de Siria, para lo cual las agencias internacionales necesitan un acceso "sin restricciones", según el ex secretario general de Naciones Unidas.
