MADRID, 21 May. (EUROPA PRESS) -
Más de 1,2 millones de personas necesitan "urgentemente" ayuda sanitaria en la provincia de Cabo Delgado, en el norte de Mozambique, escenario de una escalada de los ataques en los últimos años que derivó en marzo en la toma de la ciudad de Palma durante varios días por parte de los yihadistas.
Casi 700.000 personas viven como desplazadas por la violencia en Cabo Delgado y en otras regiones igualmente afectadas por la violencia, entre ellas casi 50.000 que huyeron de sus hogares tras el asalto sobre Palma, según los datos actualizados esa semana por el Alto Comisionado de la ONU para los Refugiados (ACNUR).
La Organización Mundial de la Salud (OMS) ha alertado de que la última ola de desplazamientos no ha hecho sino agravar la crisis humanitaria en la zona, entre otras razones porque la inseguridad ha provocado daños u obligado a cerrar 132 instalaciones médicas.
"La precariedad de miles de familias está empeorando y muchas de las personas afectadas por la violencia dependen de la ayuda humanitaria para sobrevivir", ha advertido la responsable de la OMS para África, Matshidiso Moeti, que ha abogado por aumentar los recursos con los que lograr la asistencia que "se necesita desesperadamente" en Cabo Delgado.
La OMS, que ya ha movilizado 1,77 millones de dólares en ayuda de emergencia, estima en 3,5 millones de dólares los fondos necesarios para proporcionar la asistencia necesaria, incidiendo en que de ello depende combatir enfermedades prevenibles como el cólera.
