MADRID, 13 Sep. (EUROPA PRESS) -
El director general de la Agencia Internacional de la Energía Atómica (AIEA), Rafael Grossi, ha informado este lunes de la destrucción de equipo de la agencia en las instalaciones nucleares iraníes de Karaj, un hecho que podría deberse a un ataque de los servicios secretos israelíes, el Mossad.
"Aún estamos estudiando el alcance de las pérdidas" de datos de las cámaras dañadas, ha explicado Grossi, que espera que las redundancias limiten el perjuicio. El máximo responsable de la AIEA no ha mencionado ninguna posible causa de los daños.
Las instalaciones de Karaj albergan centrifugadoras nucleares para el enriquecimiento de uranio. En julio la propia República Islámica informó de un acto de "sabotaje" perpetrado en junio.
El propio Grossi informó el domingo de la reactivación de las cámaras de vigilancia en instalaciones nucleares iraníes, aunque los inspectores no podrán acceder a los datos recopilados por las nuevas cámaras.
El incidente ha tenido lugar además en medio del proceso de negociación en marcha en la capital de Austria, Viena, para el retorno de Estados Unidos al acuerdo nuclear de 2015 y la retirada de sanciones contra Irán de cara a su vuelta al cumplimiento de todas las cláusulas del pacto.
