ROMA, 22 Nov. (EUROPA PRESS) -
La jefa de los inspectores de la delegación de la Comisión Europea enviados a Nápoles para tratar la emergencia de las basuras, Pia Bucella, ha declarado que después de dos años "la situación no es muy diferente, ya que las basuras están por las calles y no hay un plan de tratamiento o de gestión de la recogida diferenciada".
Bucella ha subrayado que han hablado tres horas sobre el dictamen de la Comisión Europea del 4 de marzo de 2008, en el cual se sancionaba a Italia por no realizar una red integrada de tratamiento de basuras en Campania y por no comenzar con la eliminación de los desperdicios.
En 2008, Nápoles vivió una situación parecida a la que vive hoy. Los desperdicios se acumularon entonces en las calles de la ciudad y la Comisión Europea estableció duras sanciones a la ciudad italiana para que acabase con la acumulación de las basuras e impusiera un plan de gestión de las mismas.
Según el diario 'La Stampa', los comisarios no se contentarán esta vez con una presentación de un plan de gestión y tratamiento de basuras, sino que quieren que sea implantado.
Por su parte, el presidente de la República, Giorgio Napolitano, ha anunciado en un comunicado que no ha recibido todavía el texto del decreto-ley del Consejo de ministros del pasado 18 de noviembre, sobre la recogida de basuras y la implantación de la maquinaria de tratamiento de la basura en Campania.
Sin la firma del presidente, el decreto-ley no puede entrar en vigor, por lo que Giorgio Napolitano ha sostenido que se reserva "cualquier valoración sobre el decreto".
Mientras tanto, la situación en Nápoles es alarmante. La ciudad se encuentra invadida por 2.550 toneladas de basura en la calles, que esperan todavía su recogida, según ha señalado el consejero de Sanidad, Paolo Giacomelli, al 'Corriere della Sera'. Según ha destacado Giacomelli, el domingo fueron recogidas 1.100 toneladas y la noche del lunes la recogida está limitada a 750 toneladas que "pueden ser acogidas por el vertedero de Chiaiano".
Giacomelli ha sostenido que a partir del martes "la situación será dificilísima", ya que la ciudad no puede gestionar un cúmulo de 600 toneladas al día de basuras sin recoger. Asimismo ha sostenido que el personal "está desmotivado tras haber recogido 1.000 toneladas, porque ahora damos marcha atrás".
Además ha declarado que este martes hablará con los presidentes de las regiones, a los cuales se les pedirá la disponibilidad para acoger las basuras provenientes de Campania. Giacomelli ha subrayado que la disponibilidad expresada por la región de Toscana "debe ser verificada".
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