ROMA, 29 Ene. (EUROPA PRESS/G. Moreno) -
El presidente de Italia, Giorgio Napolitano, se reunirá hoy con los líderes de los principales partidos políticos -Silvio Berlusconi, de Forza Italia (centro-derecha) y Walter Veltroni, del Partido Democrático (centro-izquierda)-- en su cuarto día de consultas extraordinarias para encontrar una solución a la crisis institucional que atraviesa el país tras la dimisión del primer ministro, Romano Prodi.
La de hoy se presenta como la jornada clave para definir el futuro del país, que se debate entre la convocatoria inmediata de elecciones anticipadas o la instauración de un Gobierno interino o técnico con el objetivo de que lleve a cabo la reforma de la ley electoral en el menor tiempo posible.
Napolitano recibió ayer en el Quirinale --sede de la presidencia de la República italiana-- a los representantes de numerosos partidos para conocer mejor su posicionamiento sobre cuál sería el mejor modo de solucionar la crisis.
Tras entrevistarse con el jefe de Estado, los partidos volvieron a insistir en la postura que llevan defendiendo desde que cayó el Gobierno, sin que hubiera sorpresas de última hora. Así, a grandes rasgos, el centro-derecha sigue presionando para que se convoquen elecciones cuanto antes, mientras que el centro-izquierda insiste en la necesidad de llevar a cabo antes la reforma electoral.
Tanto la Alianza Nacional (AN) de Gianfranco Finicomo como la Liga Norte de Umberto Bossi consideran que "no tendría sentido" dar vida a un Gobierno institucional para que reformule la ley electoral, cuando en veinte meses de legislatura los partidos sólo han encontrado "divisiones" a la hora de ponerse de acuerdo al respecto.
Más abierta se muestra la formación centrista de Unión de Demócratas Cristianos (UDC)-perteneciente a la misma coalición de centro-derecha--, y cuyo líder, Pierferdinando Casini, abogó por la creación de un "Gobierno de pacificación" formado por "gente responsable de centro-derecha y centro-izquierda".
Desde el lado de las izquierdas, también pasó hoy por el Quirinale Refundación Comunista, que volvió a pedir un ejecutivo de transición para afrontar las reformas institucionales que necesita el país.
También Veltroni quiso hacer oír su voz para lanzar su enésimo llamamiento a la "responsabilidad" y que, según su punto de vista, sería la creación de un Gobierno con la condición de que saque adelante la reforma electoral entre los próximos ocho o, como mucho, doce meses.
Después de entrevistarse hoy con los principales partidos políticos de Italia, Napolitano escuchara a algunos de sus predecesores en el cargo y en concreto a los ex presidentes Francesco Cossiga, Oscar Luigi Scalfaro y Carlo Azeglio Ciampi. Una vez finalizados los coloquios, podría dar a conocer su decisión definitiva hoy mismo o mañana por la mañana, como muy tarde.
