MADRID, 26 Dic. (EUROPA PRESS) -
El líder conservador israelí Benjamin Netanyahu ha informado este lunes formalmente al presidente de la Knesset o Parlamento israelí, Yariv Levin, de que cuenta con los apoyos necesarios para formar gobierno tras cerrar un acuerdo de coalición entre su formación, el Likud, tres partidos de ultraderecha y dos partidos ultraortodoxos.
Ahora comienza oficialmente a correr el tiempo para la investidura, que ha sido convocada para el jueves por la mañana. Sin embargo, la votación podría aplazarse como muy tarde hasta el lunes próximo, 2 de enero, informa 'The Times of Israel'.
Netanyahu debe ahora superar algunos trámites más tales como la formalización de su acuerdo de coalición con la mayoría de sus socios, cerrar el reparto de carteras ministeriales dentro del Likud y concluir la redacción de dos leyes que exigen sus socios de gobierno como condiciones previas para prestar su apoyo al nuevo ejecutivo.
Los líderes de los partidos que serán oposición se han reunido este lunes en la Knesset y han publicado un comunicado conjunto en el que se comprometen a colaborar ante un gobierno que consideran demasiado religioso y extremista.
"Vamos a colaborar para combatir a este gobierno retrógrado y antidemocrático que se está creando y que quiere desmantelar Israel desde dentro", señala el texto firmado por Yair Lapid (Yesh Atid), Benny Gantz (Unidad Nacional), Merav Michaeli (Partido Laborista), Avigdor Liberman (Yisrael Beiteinu) y Mansur Abbas (Raam).
"Prometemos que cuando volvamos al poder anularemos la legislación extremista que daña a la democracia, la seguridad y la economía de la sociedad israelí", han añadido.
Mientras, Netanyahu ha acusado a Lapid de no entender el resultado de las elecciones del 1 de noviembre y le ha pedido "responsabilidad". "Lapid. Perder unas elecciones no significa el final de la democracia. Rechazas aceptar la decisión del pueblo", ha apuntado en un vídeo publicado en redes sociales.
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