El presidente critica las "injerencias en asuntos africanos" y la "actitud colonialista" de los países europeos
MADRID, 9 Dic. (EUROPA PRESS) -
El presidente de Guinea Ecuatorial, Teodoro Obiang Nguema, ha afirmado que es "el garante de la paz y la estabilidad" en el país tras tomar posesión para un nuevo mandato y ha destacado que cuenta con el apoyo "abrumador" de la población, después de unas elecciones en las que se ha impuesto nuevamente con cerca del 95 por ciento de los votos, entre denuncias de fraude por parte de una oposición ya muy coartada.
"Sin miedo a equivocarme soy, hasta ahora, el garante de la paz y la estabilidad de nuestro país", ha dicho el mandatario tras jurar el cargo de presidente y prorrogar otros siete años su mandato, según ha informado la Oficina de Información y Prensa de Guinea Ecuatorial. Obiang es el líder mundial que más tiempo lleva en el cargo, tras asumir el poder en un golpe de Estado en 1979 contra su tío, Francisco Macías Nguema.
"Tanto en el sistema monolítico, como en el pluralismo, el pueblo de Guinea Ecuatorial siempre ha venido apoyándome abrumadoramente con no menos del 90 por ciento de votos a favor de mi candidatura, lo que implica que la gestión que estamos llevando al frente de nuestro país satisface al pueblo de Guinea Ecuatorial", ha explicado durante su discurso de investidura.
Así, ha dado las gracias a la población por la "respuesta positiva" a sus "decisiones políticas, económicas y administrativas". "Vuestro voto, queridos compatriotas, no ha caído en un saco roto. Si el desarrollo de nuestro país lo hemos logrado de la nada, tengan la convicción de que mientras yo sigo siendo vuestro presidente y con los recursos disponibles, usaremos todas nuestras capacidades para que los deseos de bienestar del pueblo se cumplan cabalmente".
"Para ello, el programa político que hemos presentado al pueblo será ejecutado al cien por cien y el diseño de los nuevos programas será acorde a las necesidades actuales del pueblo en función del plan Horizonte 2035, que será la prioridad del nuevo Gobierno", ha apuntado el presidente ecuatoguineano.
Obiang ha criticado además las noticias en prensa extranjera, concretamente en medios españoles y franceses, recogiendo el posible fraude en los comicios del 20 de noviembre. "Se entiende perfectamente que, después de que los colonialistas perdieran su hegemonía en África, tras varios años de explotación de nuestras materias primas, impusieron la anulación del sistema de partido único que servía de plataforma para promover la unidad de los pueblos africanos, con la creación del pluripartidismo que ha servido de caldo de cultivo para financiar el terrorismo y el crimen organizado", ha dicho.
"Hoy, como ayer, los colonialistas desean seguir explotando nuestras materias primas y fijando precios para rebajar sus valores. Varios países africanos no gozan de su independencia como ocurre también en ciertas localidades europeas, como el caso de los 'chalecos amarillos' que protestan por la injusticia del gobierno francés, y la reivindicación de la independencia de Cataluña en España, entre otros casos", ha manifestado.
En esta línea, ha aplaudido a las juntas militares de Malí y Burkina Faso y ha argumentado que estos países "están hartos de las injerencias en los asuntos africanos". "Nuestro país ha sido víctima de las injusticias de las potencias, la actitud del colonialista ha sido la misma hasta la fecha, de hecho, nuestras independencias no se obtuvieron pacíficamente, sino en guerras", ha lamentado, antes de hacer hincapié en que "sólo devolviendo África a los africanos, problemas africanos, soluciones africanas, nuestro continente alcanzaría las mejores cotas de desarrollo".
Según el escrutinio, Obiang se impuso en las presidenciales con el 94, 9 por ciento de las papeletas, por delante de Andrés Esono, de Convergencia para la Democracia Social de Guinea Ecuatorial (CPDS), y de Buenaventura Monsuy, del Partido de la Coalición Social Demócrata (PCSD). Además, el Partido Democrático de Guinea Ecuatorial (PDGE) de Obiang se ha hecho con todos los escaños en juego: los 100 de la Cámara de los Diputados, los 55 electos del Senado --que cuenta con 70 asientos, si bien 15 son nombrados directamente por el presidente- y los 588 de las Elecciones Municipales, según los datos de la Comisión.
El CPDS anunció su rechazo a los resultados de las elecciones del 20 de noviembre por considerarlas "fraudulentas, antidemocráticas e injustas" y reclamó que sean "anulados" de cara a una repetición de la votación. "Las elecciones del 20 de noviembre han sido un auténtico golpe de Estado electoral, dado por un jefe de Estado que accedió al poder mediante un golpe de palacio y está dispuesto a permanecer en él contra la voluntad popular", dijo la formación opositora.
Obiang, de 80 años, encabeza Guinea Ecuatorial desde la asonada contra su tío, quien se convirtió en 1968 en el primer presidente del país tras la independencia de España. A pesar de que en el país existen 18 partidos legalizados, en la práctica no hay opositores con opciones reales de sacar del poder a Obiang, en medio de especulaciones sobre la posibilidad de una sucesión 'dinástica' que derive en el ascenso de su hijo 'Teodorín', vicepresidente desde 2016.
