EL CAIRO, 4 May. (EP/AP) -
El ministro palestino de Asuntos Exteriores, Mahmud Zahar, prometió hoy que la transferencia de las donaciones extranjeras a los palestinos se hará de forma "clara y legítima" a los ciudadanos, tras la reunión que mantuvo en El Cairo con responsables de la Liga Arabe.
"La transferencia de dinero al pueblo palestino se hará de modo claro y legítimo a cada ciudadano, no habrá ninguna vía secreta", afirmó Zahar. Su visita se produce un día después de que el primer ministro palestino, Ismail Haniyeh, pidiera a los dirigentes de la Liga Arabe que hicieran frente a Estados Unidos, país al que acusó de imponer un bloqueo a los palestinos. Haniyeh también pidió a los banqueros palestinos que "muestren el patriotismo necesario".
Los bancos han atrasado las transferencias de fondos al Gobierno que encabeza Hamás por temor a sanciones estadounidenses. Zahar asumió una postura dura contra los bancos que rechazan tales transferencias, afirmando que el Gobierno palestino "no tratará con bancos" que rechazan "garantizar transferencias de dinero".
El ministro indicó que una delegación del Ministerio de Finanzas palestino se ha reunido con responsables de la Liga Arabe en El Cairo para estudiar "sugerencias y alternativas" a la transferencia de fondos. Las opciones incluyen la transferencia del dinero a través de fondos establecidos por el Banco Mundial para canalizar la ayuda extranjera a los palestinos. La Liga Arabe ha prometido la transferencia de 55 millones de dólares al mes a la Autoridad Palestina y también ha recabado donaciones públicas.
Por otra parte, Zahar también señaló que el Gobierno palestino está estudiando el plan de paz de 2002 de la Liga Arabe que llama al pleno reconocimiento de Israel a cambio de un retirada a las fronteras anteriores a la guerra de 1967. "Hemos prometido al secretario general de la Liga Arabe (Amr Musa) que la estudiaremos y daremos nuestra palabra final lo antes posible", afirmo
Israel ha rechazado el plan porque llama a la retirada total israelí de Cisjordania y la franja de Gaza, territorios capturados durante la guerra árabe-israelí de 1967. El plan también propone la creación de un Estado palestino junto a Israel.
