LONDRES, 14 Mar. (de la corresponsal de EUROPA PRESS Marta Altuna) -
El ministro de Asuntos Exteriores británico, Jack Straw, compareció hoy ante la Cámara de los Comunes donde condenó los actos de violencia en Gaza y Cisjordania, que se iniciaron cuando el Ejército de Israel asaltó la prisión de Jericó reclamando a seis presos palestinos, entre ellos un importante miembro del FPLP y cerebro del asesinato de un ministro israelí en 2001.
El líder palestino, Mahmud Abbas, condenó la actuación de Estados Unidos y de Reino Unido por haber retirado a sus observadores de la prisión justo antes de que comenzara el asalto. Este acto ha provocado actos de protesta y venganza que se ha materializado con secuestros en las areas palestinas.
Straw dijo que los monitores del Reino Unido y los otros empleados del gobierno británico en la zona se encuentran a salvo en Gaza y en Ramala. Asimismo recordó que el acuerdo que estableció el envio de observadores británicos dejó claras las condiciones en las que se encuentran éstos. En un principio, aunque hubo un incremento en las amenazas en la zona, estos observadores británicos no fueron retirados.
No obstante, Straw dijo que "informaciones recientes demostraron que su posicion no era sostenible". Por ello, Straw explicó que envió una carta a Abbas para informar a la Autoridad Palestina y al gobierno israelí de su intención de retirar los observadores. "Debido a razones de seguridad no pudimos ofrecer fechas precisas de la retirada (...) pero nos aseguramos de que el presidente Abbas estuviera al tanto de nuestros planes", dijo.
Asimismo, Straw recomendó que los ciudadanos británicos que no viajen a los territorios ocupados. Además, dijo que ha hablado con el presidente Abbas, con la secretaria de Estado norteamericana, Condoleezza Rice y con el ministro de Asuntos Exteriores israelí sobre los actos de violencia.
