KIEV, 14 Feb. (Reuters/EP) -
La Fiscalía General de Ucrania ha pedido este martes una pena de cuatro años y medio de prisión durante el juicio por corrupción contra el exministro del Interior Yuri Lutsenko y aliado político de la líder opositora Yulia Timoshenko, que cumple una pena de siete años de prisión por abuso de poder.
Lutsenko ha permanecido bajo custodia policial desde diciembre de 2010 tras ser acusado de malversación de fondos públicos. El acusado, que formó parte de dos gobiernos de Timoshenko, es la principal figura política tras la ex primera ministra que ha sido encarcelada.
Timoshenko fue condenada en octubre a siete años de cárcel por haber firmado durante su segundo Gobierno (2007-2010) una serie de acuerdos para la importación de gas desde Rusia a unos precios que perjudicaban a Ucrania.
Lutsenko contestó con ironía a la petición de la Fiscalía. "Estoy sorprendido de que no pidan que me quemen ahora mismo en la plaza", comentó. El exministro del Interior está acusado de haber dado a su chófer un apartamento como regalo y por financiación irregular de los actos por el Día Nacional de la Policía.
"Puedo decir que estoy sorprendido por las acusaciones hechas contra mi. Han rechazado todas las pruebas y han basado el caso en falsedades aportadas por la oficina de la Fiscalía General", indicó. "Niego todos los hecho, cada punto", señaló.
Entre otros aliados de la ex primera ministra acusados por la justicia destaca Valery Ivashchenko, exministro de Defensa, que se encuentra detenido desde agosto de 2010 por vender de forma ilegal una industria de reparación de barcos situada en Crimea. El marido de Timoshenko, Olexander, y el exministro de Economía Bohdan Danilishin, han huido a República Checa donde se les ha otorgado asilo.
El juicio contra Timoshenko levantó críticas en la Unión Europea y en Estados Unidos. El juicio podría forma parte de la enemistad que une a la ex primera ministra y el actual presidente, Viktor Yanukovich.
TIMOSHENKO RECHAZA SER EXAMINADA POR MÉDICOS UCRANIANOS
Este martes, un equipo sanitario formado por tres médicos canadienses y dos alemanes entre otros intentó visitar a Timoshenko en la prisión de Jarkiv, en el este del país. La ex primera ministra sufre fuertes dolores de espalda que le impiden caminar.
Sin embargo, Serhiy Vlasenko, uno de sus abogados, explicó que rechazó que la examinaran por la presencia de doctores ucranianos. "Está dispuesta a ser examinada por los médicos extranjeros", señaló.
