BRASILIA, 12 Mar. (Reuters/EP) -
El Partido del Movimiento Democrático Brasileño (PMDB), el principal socio en la coalición en el Gobierno que preside Dilma Rousseff, ha informado este sábado que podría retirar su apoyo al partido de la presidenta, el Partido de los Trabajadores (PT), en 30 días y sumarse así a los intentos de la oposición para deponer a la líder brasileña.
En una agitada convención, los líderes del PMDB han bloqueado una propuesta de aquellos delegados que querían una escisión inmediata de del Gobierno de Rousseff. Así, han acordado aplazar dicha decisión durante 30 días y dejarla en manos del comité ejecutivo, liderado por Michel Temer, vicepresidente de Rousseff.
Este espacio de tiempo, según aseguran los analistas, da al PMDB tiempo necesario para evaluar la reacción popular ante una potencial moción de censura contra Rousseff y que podría acabar con Temer como presidente.
"No podemos ignorar que Brasil enfrenta una crisis económica y política seria", ha declarado Temer en un discurso ante la convención bienal del partido. Además, el vicepresidente ha añadido que el programa del PMDB propone estimular a las empresas, reducir el tamaño del Gobierno, crear nuevos empleos y restablecer el crecimiento de una economía que se contrajo un 3,8 por ciento el año pasado, el peor dato en un cuarto de siglo.
La facción contraria a Rousseff se ha concentrado en el exterior del edificio donde se ha celebrado la convención. "Fuera Dilma", "Fuera el Partido de los Trabajadores" y "Temer presidente" han sido los eslóganes utilizados por los manifestantes.
"El gobierno es corrupto. La presidenta Rousseff está aislada y no puede hacer nada. Deberíamos irnos ahora", ha señalado por su parte durante la convención la senadora Marta Suplicy, que salió del Partido de los Trabajadores el año pasado para unirse al PMDB.
