MADRID, 25 May. (EUROPA PRESS) -
Los fiscales chilenos han acusado a una decena de personas de mantener presuntos vínculos con una red de tráfico de personas para introducir a cientos de inmigrantes chinos en el país y en la que estarían implicados altos cargos del Gobierno.
El Ministerio de Exteriores de Chile ha confirmado en un comunicado que las acusaciones proceden de una investigación sobre una red de tráfico de personas que operaba en 2016 y 2017, sin dar más detalles.
Esta organización tenía dentro de sus filas a Álex Triggo Rocco, exgobernador de la Provincia de Choapa y a Mauricio Navarro Salinas, exalcalde de Los Andes, exfiscal y militante de Democracia Cristiana (DC), pero también está imputado por estos cargos un integrante actual del Ministerio de Exteriores: Álex Brito Ortiz.
"El Ministerio de Relaciones Exteriores expresa su total condena a este tipo de acciones, rechaza de forma categórica cualquier situación o comportamiento irregular por parte de funcionarios de esta Secretaría de Estado y reafirma su compromiso y disposición con el trabajo de la justicia", señala un comunicado de la institución, remitido este sábado.
El Ministerio, que confirma la detención de Breito, ahora sometido a sumario, asegura que "ha colaborado plenamente con esta investigación en curso, que abarca hechos acaecidos en 2016 y 2017".
RED DE GRAN ENVERGADURA
"Esta es la red más grande de tráfico de migrantes de la historia de Chile", según ha explicado la subsecretaria de prevención del delito, Katherine Martorell, al diario nacional 'La Tercera'.
En total, 381 ciudadanos chinos entraron ilegalmente al país por el grupo en 2016 y 2017, según los informes.
Martorell ha añadido, en este sentido, que algunos de los migrantes fueron estafados, mientras que otros fueron abandonados o puestos en peligro. Algunos ya se habían ido a otros países de América Latina, dijo, mientras que otros se encontraban en el proceso de buscar la residencia permanente.
