BUCAREST, 21 Nov. (Reuters/EP) -
El presidente de Rumanía, Klaus Iohannis, ha rechazado este miércoles a la fiscal propuesta por el Gobierno como jefa de la oficina contra la corrupción, después del temor expresado por jueces y diplomáticos de que pueda suavizar la postura del Ministerio Público en un tema clave.
La nominación de Adina Florea, una fiscal poco conocida de la localidad de Constanza, se enmarca dentro de unos cambios de leyes y cargos promovidos por los socialdemócratas y que han generado suspicacias no solo entre la oposición, sino también en la Comisión Europea.
Las voces críticas temen que las reformas contravengan la independencia judicial y pongan en riesgo los valores democráticos que Rumanía está obligada a acatar como Estado miembro de la UE.
El cese en febrero de la anterior fiscal anticorrupción, Laura Codruta Kovesi, sacó a la calle a miles de personas. El Ministerio de Justicia había acusado a la fiscal de extralimitarse en sus funciones, motivos similares a los que esgrimió en octubre para reclamar la salida del fiscal general.
