MADRID, 20 Abr. (EUROPA PRESS) -
El presidente de Somalia, Mohamed Abdulahi Mohamed, conocido como 'Farmajo', ha dado la "bienvenida" a la Unión Africana (UA) para asumir un "papel de liderazgo" en la facilitación de un proceso que conduzca al diálogo entre el Gobierno y la oposición, en medio de una grave crisis política.
"Doy la bienvenida a la Unión Africana a asumir un papel de liderazgo en la facilitación de un proceso electoral en el que cada ciudadano elija a sus representantes mediante elecciones libres y justas", ha escrito 'Farmajo' en su perfil de Twitter.
El mandatario ha agregado que "todos los interesados somalíes participarán activamente en el diálogo sobre el futuro de nuestra democracia".
'Farmajo' ha realizado esta publicación desde República Democrática del Congo (RDC), donde se ha reunido con su homólogo, Félix Tshisekedi, con quien ha conversado sobres las relaciones bilaterales y "el papel clave" de la UA en el "desarrollo democrático de África".
La tensión ha aumentado recientemente en Somalia, que vive una crisis política ahondada por la decisión del Parlamento de prorrogar dos años el mandato del presidente pese a la ausencia de elecciones.
El Ejecutivo de Somalia rechazó la semana pasada las críticas internacionales a la decisión de la cámara baja del Parlamento de prorrogar dos años el mandato del presidente ante la ausencia de un acuerdo para la celebración de elecciones e insistió en que la medida busca "proteger las instituciones".
La decisión de la cámara baja del Parlamento ha sido duramente criticada por parte de los candidatos opositores a la Presidencia y por los presidentes de las regiones de Jubalandia y Puntlandia, rivales de 'Farmajo'. Durante los últimos meses, le han acusado de "socavar" las conversaciones para evitar que se celebren elecciones "pacíficas".
La oposición ha pedido abordar la aplicación del acuerdo de septiembre sobre la formación del comité encargado de las elecciones --cuya composición actual rechazan--, aspectos relacionados con la seguridad del proceso, cambios en la cúpula del Ejército y la Policía y un compromiso de 'Farmajo' a limitar sus competencias, así como que se investigue la represión de las protestas del 19 de febrero, que se saldaron con diez muertos.
