El presidente vuelve a declarar el toque de queda a lo largo del fin de semana
MADRID, 13 May. (EUROPA PRESS) -
El Poder del Pueblo Unido (SJB), la principal formación opositora de Sri Lanka, ha anunciado este viernes que se negará a participar en el nuevo Ejecutivo que prepara el flamante primer ministro del país, Ranil Wickremesinghe, a quien ha exigido que ratifique su mandato en una votación parlamentaria.
"Nadie del SJB aceptará carteras ministeriales en el nuevo gobierno que se formará ya que el primer ministro Wickremesinghe no tiene mandato para formar gobierno", ha asegurado el secretario general del SJB, Ranjith Madduma Bandara.
"Desafiamos al primer ministro a que demuestre una mayoría de 113 escaños en el Parlamento", ha añadido en declaraciones recogidas por el 'Daily Mirror'. Su formación es el segundo bloque parlamentario de la cámara por número de escaños: 54 por 104 del partido del Gobierno, el Frente Nacional de Sri Lanka, que en principio estaría a nueve votos adicionales de conseguir el respaldo necesario.
El secretario general del partido opositor ha prometido además que su formación volverá a impulsar un aplazado juicio político contra el presidente del país, Gotabaya Rajapaksa, verdadero artífice del cambio de Gobierno. El mandatario está acusado de exceder sus competencias democráticas gracias a una polémica enmienda constitucional que le confiere capacidades extraordinarias de gobierno, así de prácticas de corrupción y nepotismo (el exprimer ministro era su hermano Mahinda).
"Seguiremos adelante con la moción para denunciar al presidente Rajapaksa en la Cámara la próxima semana y, si el Parlamento la aprueba, el primer ministro Wickremesinghe también tendrá que renunciar, ya que también es similar a una moción de censura contra el gobierno", ha avisado.
También el líder el Partido para la Libertad de Sri Lanka (un escaño), liderado por el expresidente del país Maithripala Sirisena, se ha sumado a la negativa aunque ha matizado que su intención es la de formar una oposición responsable contra el nuevo primer ministro y el presidente del país.
Las protestas de Sri Lanka comenzaron a principios de marzo en medio de una crisis económica como el país no ha conocido desde hace su independencia en 1948, marcada por subidas inasumibles en los precios del combustible, falta de acceso a los bienes de primera necesidad, cortes en el suministro eléctrico, niveles récord de inflación y una deuda externa acumulada de casi 50.000 millones de euros.
Wickremesinghe, de 73 años, es considerado por la oposición como un elemento absolutamente continuista -- fue primer ministro de Sri Lanka entre 1993 y 1994, entre 2001 y 2004, 2015 y 2018 y de 2018 a 2019 -- que en modo alguno se distanciará de las políticas de su predecesor quien finalmente cedió el testigo esta semana tras meses de presiones.
TOQUE DE QUEDA E INTENTOS DE APACIGUAMIENTO
El presidente del país ha anunciado la situación de toque de queda este fin de semana desde las 18.00 del sábado hasta las 05.00 del domingo, según el comunicado presidencial recogido por News First, mientras el nuevo primer ministro prepara una serie de medidas de reconciliación y auxilio económico.
Wickremesinghe, para empezar, se ha comprometido a retirar la orden de "disparar a matar" que permanecía vigente entre las fuerzas de seguridad durante las últimas semanas y en especial el lunes, cuando al menos siete personas murieron y 250 resultaron heridas durante los peores incidentes desde el comienzo de las manifestaciones.
Asimismo, el primer ministro también se ha comprometido a iniciar los trámites necesarios para derogar la 20 Enmienda de la Constitución y reducir así las competencias presidenciales; y designado una comisión especial para resolver la actual crisis de escasez de alimentos esenciales, tras mantener reuniones con los embajadores de EEUU, China, Japón e India para explicar la nueva situación.
Pasado este fin de semana, el primer ministro dará a conocer el próximo lunes a la nación un informe sobre la situación real en el país con respecto a los servicios y bienes esenciales, incluidos combustible, electricidad, gas, productos alimenticios, fertilizantes y medicamentos.
"No permitiremos que ocurra una hambruna, encontraremos alimentos". Para ello quiero hacer una evaluación sobre eso ya daré una respuesta definitiva en breve", declaró a principios de esta semana en entrevista a la cadena británica BBC.
